Javier Milei, el presidente de Argentina, ha implementado una de las decisiones más polémicas desde su asunción al cargo: una reforma laboral que restringe parcialmente el derecho a huelga. A través del Decreto N° 340/2025, publicado esta semana, el gobierno libertario ha alterado el régimen laboral vigente sin pasar por el Congreso, generando una escalada sindical y judicial.
Límites a la Protesta y los Paros en Argentina
El nuevo decreto establece que, en caso de huelga, las actividades consideradas «esenciales» deberán garantizar un funcionamiento mínimo del 75%, mientras que las catalogadas como «trascendentales» tendrán que asegurar al menos el 50% de su operación. Esta medida se aplica a sectores clave de la economía, la logística, la energía, la educación y el transporte, ampliando significativamente el concepto de «servicios esenciales» en comparación con la normativa anterior.
Algunas de las actividades que ahora se consideran «esenciales» son los servicios sanitarios, farmacéuticos, telecomunicaciones, educación básica y transporte aéreo y marítimo. Por su parte, las «trascendentales» abarcan desde la industria alimentaria y los servicios logísticos hasta la producción minera, el transporte terrestre, los medios de comunicación, los bancos y el comercio electrónico.
Impacto en Sectores Conflictivos
La medida de Milei ha generado malestar en diversos sectores sindicales, como los trabajadores afiliados a sindicatos aéreos, quienes en los últimos meses del 2024 dejaron a unos 50.000 pasajeros con vuelos cancelados por su descontento con los salarios y la eventual privatización de Aerolíneas Argentinas. Además, los gremios docentes han interpretado las limitaciones como un cerrojo sobre las constantes protestas por mejores condiciones salariales.
Desde la Confederación General del Trabajo (CGT) ya dijeron que impulsarán presentaciones judiciales por «inconstitucionalidad», al considerar que el decreto del Presidente atenta contra un derecho protegido por la Constitución Nacional y los tratados internacionales.
Antecedentes y Contexto
Cabe destacar que esta no es la primera vez que Milei enfrenta conflictos con los sindicatos. Desde su llegada a la presidencia en diciembre de 2023, ha enfrentado tres paros generales de los gremios nacionales, ubicándolo como el tercer presidente argentino con más paros por tiempo de gestión desde la vuelta a la democracia en 1983.
En contraste, otros presidentes peronistas, como Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner, tuvieron una relación más benévola con los sindicatos, enfrentando un menor número de huelgas generales durante sus mandatos.
La medida de Milei refleja su intención de reducir el impacto de las protestas sindicales en la economía argentina. Según estimaciones del Instituto de Economía (Ineco) de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE), el último paro del 9 y 10 de abril le hizo perder a la economía argentina AR $208.497 millones, lo que se tradujo a unos 194 millones de dólares al tipo de cambio de ese momento (0,3% del PBI).
Conclusión: Una Batalla Abierta entre Milei y los Sindicatos
La reforma laboral impulsada por Milei ha abierto una nueva batalla entre el gobierno y los sindicatos en Argentina. Mientras el presidente busca reducir el impacto de las huelgas en sectores clave de la economía, los gremios han anunciado acciones judiciales para impugnar la medida, considerándola una violación a los derechos laborales protegidos por la Constitución y los tratados internacionales. Esta disputa promete generar una escalada de tensiones en el país.