
El sueño desempeña un papel fundamental en el desarrollo neurológico, la consolidación de la memoria y la regulación emocional de los niños. Sin embargo, muchos padres subestiman el impacto de los trastornos del sueño en el rendimiento escolar y el bienestar general de sus hijos. Según la Sociedad Española de Neurología Pediátrica (SENEP), entre el 20% y el 40% de los niños han experimentado o experimentarán problemas relacionados con el sueño en algún momento de su crecimiento.
Factores que Afectan el Sueño Infantil
El sueño de los niños no se limita únicamente a la noche, sino que también se ve influenciado por lo que sucede durante el día. Aspectos como la calidad de la luz ambiental, el nivel de actividad física y el uso de pantallas pueden modificar significativamente la arquitectura del sueño, advierte Nuria Lamagrande, coordinadora del grupo de trabajo de Trastornos del Sueño de la SENEP.
Además, los trastornos del sueño en la edad pediátrica pueden estar causados por una combinación de factores biológicos, psicológicos y conductuales. Entre los factores biológicos se encuentran la predisposición genética, la sensibilidad individual a la luz y las condiciones médicas subyacentes, como la ferropenia. Sin embargo, el componente conductual suele jugar un papel determinante, y modificar ciertos hábitos puede ser una de las estrategias más efectivas para mejorar el descanso infantil.
Principales Trastornos del Sueño en Niños
Aunque en población sana muchos problemas de sueño son alteraciones conductuales, existen trastornos del sueño más frecuentes en niños, como:
- Insomnio: dificultad persistente para conciliar, mantener o tener un sueño de calidad, a pesar de tener las condiciones adecuadas para dormir.
- Síndrome de Retraso de Fase: común en la adolescencia, se caracteriza por un retraso de al menos dos horas en la hora de acostarse y despertar en comparación con lo socialmente establecido.
- Síndrome de Piernas Inquietas: se manifiesta como una necesidad imperiosa de mover las piernas, lo que dificulta conciliar el sueño. Muchos niños lo describen como «cosquillas» o «hormiguitas».
- Síndrome de Apnea-Hipopnea del Sueño: durante el sueño se producen pausas en la respiración, generando microdespertares. Una de las causas más frecuentes es la hipertrofia amigdalar.
- Hipersomnia: se caracteriza por somnolencia diurna excesiva, relacionada con déficit crónico de sueño, influido por el uso de pantallas y factores sociales.
Estrategias para Mejorar el Sueño Infantil
Para promover un sueño saludable en los niños, la experta Nuria Lamagrande recomienda:
- Establecer rutinas diarias regulares en cuanto a horarios de sueño, alimentación y exposición a la luz solar.
- Evitar el uso de pantallas al menos dos horas antes de acostarse, ya que la luz azul inhibe la producción de melatonina.
- Fomentar una alimentación adecuada, evitando acostarse con hambre o sensación de pesadez.
- Practicar ejercicio físico, pero evitando actividades estimulantes en las horas previas al sueño.
- Establecer un ritual de sueño predecible, terminando el día con actividades relajantes como leer un cuento.
- Limitar el consumo de estimulantes como la cafeína y los alimentos azucarados.
- Utilizar el dormitorio solo para dormir, evitando pantallas y actividades estimulantes.
Es fundamental educar a las familias en hábitos de sueño saludables desde edades tempranas, ya que muchos problemas de sueño en la infancia podrían prevenirse con estrategias adecuadas de higiene del sueño, concluye la experta.