Balin Miller era un joven escalador deportivo cuya pasión por las montañas lo llevó a conquistar algunas de las cimas más peligrosas del mundo. Originario de Alaska, Miller comenzó a escalar desde muy temprana edad junto a su padre, desarrollando rápidamente una habilidad y determinación que lo convertirían en una figura destacada del alpinismo.
A sus 23 años, Miller ya había logrado hazañas impresionantes, como ser el primer escalador en realizar en solitario la ruta Slovak Direct en el Monte McKinley (Denali), una de las cumbres más desafiantes de Estados Unidos, en tan solo 56 horas. También había escalado la emblemática Vía dei Ragni en el Cerro Torre de la Patagonia y la Ruta de Hielo Reality Bath en las Rocosas Canadienses, una vía que había permanecido intacta durante 37 años.
Una Caída Trágica en Plena Transmisión
El miércoles, Miller se encontraba finalizando una de las rutas de la famosa pared de granito en el Parque Yosemite, en California, cuando ocurrió la tragedia. Mientras descendía haciendo rappel para recuperar sus bolsas de izado, su cuerda no alcanzó la ubicación de las mismas por varios metros. Según el fotógrafo Tom Evans, quien documentaba la temporada de escalada, «en el descenso, se deslizó más allá del extremo de la cuerda».
La caída de cientos de metros de altura fue presenciada en vivo por cientos de espectadores que seguían la transmisión de Miller a través de TikTok. «Fue tan traumático. No puedo parar de verlo en mi cabeza», escribió una usuaria en un hilo de Facebook sobre el accidente.
El Legado de Balin Miller
La madre de Balin, Jeanine Girard-Moorman, expresó su profundo dolor en redes sociales: «Mi corazón está hecho añicos. No sé cómo voy a superarlo». Miller, que se estaba convirtiendo rápidamente en una leyenda del alpinismo, había logrado conquistar algunas de las cimas más desafiantes del mundo, dejando un legado que inspirará a generaciones futuras de escaladores.
El Capitán, en el Parque Nacional de Yosemite, donde ocurrió la tragedia, es una pared vertical de 914 metros de altura que ofrece diversas rutas para escaladores de todos los niveles. Lamentablemente, fue en este emblemático escenario donde la vida de Balin Miller se apagó de manera tan abrupta, conmocionando a la comunidad alpinista y a todos quienes siguieron su increíble trayectoria.
