En medio de un tenso ambiente, las autoridades han iniciado el desalojo del campamento Unión Sin Frontera en Placilla, Valparaíso. Los ocupantes, cubriendo sus rostros, han respondido con la quema de barricadas y el lanzamiento de objetos contundentes contra los agentes de Control de Orden Público.
Según el mayor Javier Oportus, comisario de la Segunda Comisaría de Valparaíso, el operativo se lleva a cabo en cumplimiento de una orden judicial de la Corte de Apelaciones. Originalmente, el campamento contaba con alrededor de 120 viviendas, pero en la actualidad solo quedan unas 15. El delegado regional, Yanino Riquelme, afirma que la mayoría de los ocupantes ya se encuentran retirando sus pertenencias.
Familias Desplazadas Buscan Soluciones Duraderas
Las familias desalojadas han criticado la respuesta de las autoridades, señalando que el albergue proporcionado en el Estadio O’Higgins solo será por 3 días. «¿A quién le sirve un albergue por tres días?, y sin mis animales, entonces ¿qué voy a hacer?», expresó uno de los desalojados.
Desde una perspectiva económica, esta situación representa un desafío significativo para las familias, quienes han invertido tiempo y recursos en construir sus hogares en el campamento. La pérdida de sus viviendas y pertenencias puede tener un impacto devastador en su estabilidad y bienestar a largo plazo.
Protección de Menores y Animales
Según las autoridades, no había niños ni adolescentes presentes en el momento del desalojo, ya que «las familias tomaron las medidas». Sin embargo, la preocupación por el bienestar de los menores y los animales de compañía sigue siendo una prioridad fundamental.
La comunidad de Placilla enfrenta ahora la urgente necesidad de soluciones de vivienda sostenibles y a largo plazo, que brinden seguridad y estabilidad a estas familias vulnerables. Las autoridades deben trabajar en estrecha colaboración con los residentes para encontrar alternativas que respeten sus derechos y dignidad.
Hacia una Solución Integral
Más allá del desalojo inmediato, es crucial que las autoridades aborden las raíces del problema de la vivienda en Placilla. Esto requiere un enfoque integral que considere las necesidades de la comunidad, la disponibilidad de terrenos adecuados y la implementación de programas de vivienda social asequibles.
Solo a través de un diálogo constructivo y la implementación de soluciones a largo plazo, se podrá garantizar que las familias de Placilla tengan acceso a un hogar digno y seguro, preservando la unidad familiar y el bienestar de todos los miembros de la comunidad.
