La euforia por los muñecos Labubu, el fenómeno mundial de la juguetera china Pop Mart, parece estar llegando a su fin. Las acciones de la empresa se han desplomado hasta un 10,8% en un solo día, su mayor caída desde abril, en un nuevo episodio de volatilidad bursátil que contrasta con los fuertes resultados de ventas divulgados recientemente.
El retroceso refleja la creciente cautela de los inversores ante la posibilidad de una ralentización del crecimiento de Pop Mart, después de varios trimestres de expansión impulsada por la popularidad de sus productos coleccionables. Si bien el miércoles los títulos de la compañía habían avanzado un 4,23% en el parqué de Hong Kong, el jueves vieron un brusco descenso, atribuido en gran medida a la recogida de beneficios tras la rápida escalada de la acción y a las dudas sobre la sostenibilidad del ritmo de crecimiento de la empresa.
Crecimiento Vertiginoso y Preocupaciones sobre su Sostenibilidad
Según los datos suministrados por la propia Pop Mart, la facturación en el tercer trimestre se incrementó entre un 245% y un 250% interanual, impulsada por la viralización de Labubu en redes sociales y la expansión de su negocio más allá del mercado chino. Las ventas domésticas crecieron un 190%, mientras que las internacionales se dispararon hasta un 370%, con un incremento especialmente notable del 175% en Asia-Pacífico, más de un 740% en Europa y casi un 1.270% en América.
Sin embargo, este vertiginoso crecimiento ha generado dudas sobre su sostenibilidad a largo plazo. Wang Ning, consejero delegado y fundador de Pop Mart, se ha mostrado confiado en la resiliencia del personaje Labubu, defendiendo que los iconos culturales mantienen su rentabilidad más allá de su pico de popularidad. Pero la falta de una fecha concreta para la presentación oficial de las cuentas de la empresa mantiene la incertidumbre sobre la evolución futura del grupo.
Adaptándose a una Demanda Inesperada
De acuerdo con información de Bloomberg, la explosión de demanda ha alterado las propias previsiones internas de Pop Mart. Si al inicio de 2024 la meta de facturación se situaba en 2.800 millones de dólares, en agosto Wang la elevó hasta los 4.200 millones, considerando alcanzable esa cifra gracias al impulso global de la marca Labubu.
Fundada en Pekín en 2010, Pop Mart se ha consolidado como uno de los principales referentes del ocio coleccionable asiático, combinando figuras de diseño, artículos de edición limitada y colaboraciones con marcas, artistas y franquicias internacionales. Su modelo de venta, basado en las llamadas cajas sorpresa, fomenta la recurrencia de compra y ha generado una comunidad de seguidores dispuestos a pagar primas elevadas por piezas exclusivas.
Conclusión: Mantener el Impulso en un Entorno Cambiante
La caída de las acciones de Pop Mart refleja los desafíos que enfrenta la empresa para mantener el impulso de su fenómeno Labubu en un entorno cada vez más competitivo y volátil. Si bien la compañía ha demostrado su capacidad de adaptación y crecimiento, deberá encontrar la forma de sostener esa trayectoria y convencer a los inversores de la solidez de su modelo de negocio a largo plazo.