Cuando la vida nos enfrenta a momentos de incertidumbre y angustia, es en nuestra fe donde encontramos la fuerza para superar los desafíos. Esta es la historia de Perla Ilich, quien recientemente vivió una experiencia desgarradora al ver a su hijo Mateo Isaac gravemente enfermo.
A través de sus redes sociales, Perla relató el dramático momento en que Mateo debió ser internado de urgencia. El pequeño llegó «muy deshidratado y con dolor estomacal agudo», con una fiebre que alcanzó los 42,5 grados. «Tengo mucha fe en Dios, porque cada momento de mi vida tiene un porqué. Todo lo que viví estos días fue terrorífico», expresó Perla, visiblemente afectada.
Pero en medio de la angustia, Perla encontró consuelo en su fe. «Le pedí a Dios que mi hijo volviera a gritar, a jugar, a ser el niño que era… y Él me escuchó», compartió. En una extensa publicación, la madre agradeció a Dios por responder a su clamor y devolver la salud a su hijo.
Una Lucha Espiritual
Perla relató que Mateo llegó «delirando y viendo cosas que no estaban ahí» debido a la severa deshidratación causada por un rotavirus. «Fueron muchas las interrogantes: si era una bacteria en la sangre, porque su riñón estaba seco», explicó.
En medio de la incertidumbre, Perla se arrodilló y le dijo a Dios: «‘Señor, me lo entregaste sano, aunque fue prematuro, y así lo quiero de vuelta’. Y cumpliste. Hoy está sano en tu nombre. Quiero engrandecer el nombre de Dios para que todo niño y enfermo, toda madre o padre que hoy pida, sea escuchado y sane a sus hijos».
Una Madre Agradecida
Perla finalizó su mensaje agradeciendo el apoyo de sus seguidores y reafirmando su fe: «Mi cansancio como madre es grande, pero como muchas mamás, me levanto luchando y confiada de que jamás dejas a tus hijos. Te amo, Jesús. Gracias a cada uno de ustedes por sus oraciones».
La historia de Perla Ilich es un recordatorio de que incluso en los momentos más oscuros, la fe y la esperanza pueden ser nuestro mayor consuelo. Su valentía y su devoción inspiran a todos los padres que enfrentan desafíos similares a mantener la fe y a luchar por la salud de sus hijos.
