En un intenso episodio del reality show ‘Mundos Opuestos’, la showwoman chilena Marlen Olivari se vio envuelta en un acalorado enfrentamiento con el exfutbolista Daúd Gazale. La disputa, que comenzó por un incidente con un trozo de pastel, rápidamente escaló a un choque de personalidades y principios.
Olivari, conocida por su firme carácter, no dudó en responder a los constantes ataques de Gazale, quien la acusó de ser ‘asegurada’ y criticó su supuesta actitud de dar comida a otros participantes solo frente a las cámaras. La showwoman, sin embargo, no se quedó callada y le recordó su labor social y trabajo con fundaciones y ollas comunes.
Una Batalla de Género y Valores
La discusión escaló cuando Olivari acusó a Gazale de ser irrespetuoso con las mujeres, afirmando que lo encontraba «poco hombre» y «insolente». Por su parte, Gazale insistió en que Olivari era egoísta con los recursos, argumentando que, como hombre, siempre quedaría en desventaja en una discusión frente a una mujer.
Durante la ceremonia de nominación, Olivari habló con la voz quebrada sobre el maltrato que sentía recibir por parte de Gazale, cansada de sus insultos y de que hablara mal de ella con otros. Cuando llegó el turno de nominar, Gazale eligió a Olivari, lo que ella respondió con dureza, asegurando que él sí hablaba a sus espaldas y que el público lo estaba viendo.
Un Pacto Roto y una Lección de Integridad
Finalmente, Olivari reveló que ambos habían pactado no votarse, pero que ella, por ser una mujer de palabra, aún lo respetaba. Gazale, en cambio, dijo haber roto el acuerdo porque ya no se sentía cómodo, cerrando así otro intenso capítulo en ‘Mundos Opuestos’.
Esta confrontación entre Olivari y Gazale pone de manifiesto las diferencias de género y los choques de valores éticos que pueden surgir en un entorno competitivo como un reality show. La firmeza y la integridad de Olivari, en contraste con la actitud de Gazale, dejaron una lección sobre la importancia de respetar a los demás, independientemente del género.
