En un giro inesperado, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha salido en defensa de su fiscal general, Pam Bondi, frente a los ataques de sus propios simpatizantes del movimiento «Make America Great Again» (MAGA). Estos seguidores exigen la renuncia de Bondi por su supuesta mala gestión del caso del financiero Jeffrey Epstein, acusado de pederastia.
Trump, a través de su red social Truth Social, pidió unidad a sus partidarios y les solicitó que «dejen a Pam Bondi hacer su trabajo» porque «es grandiosa». El mandatario también instó a sus seguidores a «no desperdiciar tiempo y energía en Jeffrey Epstein, alguien a quien a nadie le importa».
Contradicción de Teorías de Conspiración
La defensa de Trump a Bondi se produce después de que el Departamento de Justicia (DOJ) y el FBI concluyeran, en un memorando, que no hay evidencia de que Epstein mantuviera una «lista de clientes» famosos. Esta conclusión contradice una teoría de conspiración popular entre la derecha, que afirmaba que el magnate había sido asesinado para ocultar dicha lista.
Los simpatizantes más acérrimos del movimiento MAGA han quedado insatisfechos con estos hallazgos, que también confirman que Epstein se suicidó mientras estaba preso en Nueva York en 2019. Cabe recordar que Trump, Bondi y el subdirector del FBI, Dan Bongino, habían prometido revelar «la verdad» sobre el caso antes del inicio de esta Administración.
Tensión entre el DOJ y el FBI
Según informes de prensa, el choque entre el DOJ y el FBI por el manejo del caso Epstein ha generado incluso rumores sobre una posible renuncia de Bongino. Sin embargo, Trump negó cualquier problema dentro de su gobierno, afirmando que tienen «una Administración perfecta, de la que habla el mundo», y que «personas egoístas» están intentando dañarla «todo por un sujeto que nunca muere, Jeffrey Epstein».
En este contexto, el líder republicano ha expresado su irritación por las continuas preguntas sobre el caso Epstein, llegando a exclamar: «¿Siguen hablando de este tipo, de este asqueroso? Es increíble».
Conclusión
La defensa de Trump a Bondi y su llamado a la unidad entre sus seguidores sugieren que el presidente busca mantener la cohesión de su movimiento MAGA, a pesar de las controversias y teorías de conspiración que rodean el caso Epstein. Sin embargo, la tensión entre el DOJ y el FBI, así como la insatisfacción de algunos partidarios, plantean interrogantes sobre la gestión de este delicado asunto por parte de la Administración.
