En un momento en que Chile enfrenta una crisis de natalidad, con cada vez menos mujeres eligiendo ser madres, la derecha conservadora ha reaccionado rápidamente para oponerse al proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo con Plazo, sin siquiera conocer su contenido. Sin embargo, una mirada más profunda revela una preocupante contradicción en su discurso.
La Derecha y sus Contradicciones
Un análisis de las recientes votaciones de los partidos de derecha, como Republicanos, UDI, RN y Social Cristianos, muestra una clara tendencia a rechazar iniciativas que podrían mejorar las condiciones de vida de las familias chilenas. Por ejemplo, votaron en contra de la fallida Reforma Tributaria que buscaba establecer un pacto fiscal por el desarrollo y la justicia social, y también se opusieron a la reciente reforma de pensiones.
Además, la derecha ha mostrado una sistemática resistencia al aumento del salario mínimo mensual y a impulsar mejoras laborales que permitan una mejor conciliación entre la vida familiar y profesional. Incluso, cuando se discutía la arista social de la Ley Corta de Isapres, aprobada en 2023, la derecha se opuso.
Excluyendo a las Mujeres del Debate
Aún más preocupante es la falta de votos que tuvo el proyecto de aborto con plazos para ser revisado por la Comisión de Mujeres de la Cámara de Diputados y Diputadas. Esta iniciativa, que impacta directamente en la vida de niñas, adolescentes y mujeres, quedó excluida de este espacio de discusión, cuyo objetivo es impulsar iniciativas con perspectiva de género y promover la igualdad material para las mujeres.
¿Qué Tipo de Maternidad Defienden?
Ante este panorama, cabe preguntarse: ¿Por qué vida están abogando entonces? ¿En qué condiciones se espera que vivan las familias en Chile? El debate legislativo que se avecina requiere de la mayor responsabilidad y ética por parte de nuestros congresistas. Negarse a discutir sobre derechos sexuales, reproductivos y no reproductivos, argumentando la defensa de la familia, para luego rechazar iniciativas que podrían mejorar las condiciones de vida de la población, ya no es admisible.
Se necesita altura de miras y actuar en consecuencia, para que en Chile vivan mejor tanto aquellas que no quieran ser madres, como aquellas que desean contar con mejores condiciones para poder hacerlo.
