El reconocido entrenador Marcelo Bielsa, actualmente director técnico de Uruguay, protagonizó otro enojo en una conferencia de prensa. Esta vez, en suelo charrúa, luego de que un medio expusiera a un viejo conocido suyo, Carlos Bonelli, un periodista discapacitado español.
El hecho ocurrió tras la victoria de la ‘Celeste’ ante Venezuela por 2-0 en el estadio Centenario, resultado que dejó a los uruguayos con un pie en el Mundial, a dos fechas del término del proceso clasificatorio.
La exposición que molestó a Bielsa
Un medio uruguayo tomó la palabra en la conferencia y acabó incomodando al rosarino. «Marcelo, quería contar, sé que lo conoce muy bien, pero Carlos Bonelli es un periodista que vive con múltiples discapacidades producto de un accidente. Él vino de España a verte porque está grabando documental sobre su vida…», alcanzó a decir el comunicador, antes de ser interrumpido por Bielsa.
«No, pero hablemos del partido ¿La exposición a qué va?», cuestionó el DT, a lo que el periodista remarcó «para que la gente sepa». La respuesta no dejó satisfecho a Marcelo: «¿Pero qué es lo que tienen que saber?«.
La defensa de Bielsa a su ‘amigo’
La situación se volvió más incómoda cuando el micrófono llegó hasta el propio Bonelli, quien saludó al seleccionador. «Carlitos cómo estás. Yo muy bien, muy alegre de verte», expresó Bielsa. Sin embargo, el DT no quedó conforme: «Me extraña que me preguntes si te conozco. Decí, decí. Ya que tenés un vocero que difunde, decí lo que me tengas que decir«, agregó.
Ante eso, Bonelli manifestó que después conversarían, pero Bielsa lo frenó en seco: «No tenemos nada que hablar. No me presto a la insistencia intolerable de la gente que te acompaña. Para mí seguís siendo un grande, pero te acompaña gente que no tiene el mismo sentido de la integridad que aprendí a respetar en vos. Lamento tener que hacer esta conversación pública», afirmó.
Un gesto final de Bielsa
Bielsa cerró diciendo: «Mis afectos, mis respetos, mi consideración para vos siempre de la misma manera. Pero tu nombre lo utilizaron gente de una manera tan insistente y burda, que me pareció que la única manera que debía respetarte era ignorando el sentido comercial y avasallante de la gente que te acompaña.»
Hay que decir que Marcelo Bielsa, una vez terminada la conferencia, se acercó a Bonelli y conversaron. ¿Qué se dijeron? Probablemente nunca se sepa.