En una decisión que ha generado debate, el Tribunal de Concepción ha condenado a un abogado a cumplir una pena de 4 años de libertad vigilada por su responsabilidad en una millonaria estafa. Julio Briones Soto, el profesional del derecho implicado, fue encontrado culpable de apropiarse de 120 millones de pesos que involucraba una transacción entre dos de sus clientes.
La Fiscalía se manifestó conforme con el fallo dictado, señalando que la pena se encontraba dentro de las expectativas del organismo persecutor. Además de la pena principal, los jueces ordenaron al condenado el pago de una multa de $1.800.000.
Sin embargo, Gonzalo Galaz, abogado querellante por el comprador estafado, expresó que no hay una total conformidad con la sanción impuesta, evaluando la posibilidad de interponer un recurso de nulidad. Según Galaz, la pena no se condice con el grave daño causado a sus clientes.
Cabe destacar que el propio Julio Briones había anticipado, tras conocer el veredicto condenatorio, que recurrirá a la nulidad de la sentencia. Esta decisión del tribunal pone de manifiesto la complejidad y las implicaciones de este caso de corrupción profesional, donde se espera que la justicia logre un equilibrio entre la sanción y la reparación del daño a las víctimas.
