Singapur, a través de su ministro de Relaciones Exteriores Vivian Balakrishnan, ha realizado un llamado urgente a un «alto el fuego inmediato y efectivo» en Birmania, con el objetivo de facilitar los esfuerzos de ayuda humanitaria tras el devastador terremoto que ha dejado más de 1.600 personas fallecidas en el país.
La petición de Singapur se produjo durante una reunión especial de emergencia de los cancilleres de los diez países que conforman la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), incluida Birmania. En la cita, Balakrishnan señaló que un alto el fuego «facilitaría los esfuerzos para prestar asistencia humanitaria y la reconciliación nacional, la paz y la reconstrucción a largo plazo».
Llamado a la Unidad Regional
La solicitud de Singapur se produce en un momento crítico, ya que desde el golpe de Estado de febrero de 2021, el bloque regional ha mantenido un veto a los representantes de la junta militar birmana en sus reuniones. No obstante, el jefe de la diplomacia castrense, Than Swe, participó en la cita de hoy junto a otros ministros de la región.
«El ministro de Malasia, país que acoge este año la presidencia rotatoria de la ASEAN, y yo planeamos visitar Birmania el 5 de abril para seguir analizando las necesidades humanitarias con nuestro homólogo birmano», apuntó el diplomático tailandés Maris Sangiampongsa.
Tregua Temporal para Facilitar Rescates
La petición de Singapur se produce después de que el Gobierno de Unidad Nacional (NUG) de Birmania, que reclama la legitimidad democrática, anunciara una tregua de dos semanas en las zonas afectadas por el sismo. Según el NUG, el cese de hostilidades busca «facilitar las tareas de rescate de las personas atrapadas en los escombros y en los edificios derruidos», aunque se reservan el derecho a usar la fuerza en acciones defensivas.
El poderoso terremoto, de magnitud 6.8, se registró el pasado viernes a las 12:50 hora local (6:20 GMT), con epicentro a unos 17 kilómetros de las ciudades de Sagaing y Mandalay, la segunda mayor urbe de Birmania. El régimen castrense ha declarado el estado de emergencia en seis zonas afectadas, donde el conflicto activo entre el Ejército y grupos rebeldes podría dificultar el acceso de la ayuda humanitaria.
Ante esta situación crítica, el llamado de Singapur a la unidad regional y el cese temporal de hostilidades representa un paso crucial para canalizar la asistencia a las víctimas y avanzar hacia una reconciliación a largo plazo en Birmania.
