Una polémica decisión que pone en riesgo la seguridad del país
El subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, ha expresado su preocupación por la reciente resolución del juez Daniel Urrutia, que permite a los reos del Recinto Penitenciario Especial de Alta Seguridad mantener videollamadas con sus familiares. Monsalve considera este hecho como grave y argumenta que socava los esfuerzos que se están realizando para combatir el crimen organizado.
En palabras del subsecretario, ‘uno de los elementos centrales de la lucha contra el crimen organizado es que sus líderes, que están detenidos, deben ser aislados del exterior y no pueden seguir ejerciendo su jerarquía sobre la organización. Por eso es que estas personas están en módulos de alta o máxima seguridad’.
Un esfuerzo en vano
El Estado ha invertido grandes recursos en la lucha contra el crimen organizado, especialmente en la prevención de delitos como secuestros, homicidios y trata de personas. Sin embargo, la decisión del juez Urrutia de permitir las videollamadas de los reos pone en peligro todo este esfuerzo.
Según Monsalve, ‘este esfuerzo que hace el Estado pierde todo sentido si, finalmente, un juez autoriza a los reos a comunicarse por videollamadas con sus familiares o incluso con otros miembros de la organización criminal’.
Una señal equivocada
El subsecretario Monsalve recalca que esta decisión es completamente equivocada y perjudica la seguridad del país. Además, envía una señal negativa al permitir que los líderes de las organizaciones criminales mantengan contacto con el exterior.
En sus propias palabras, ‘esperamos que esto no vuelva a ocurrir y que no se autoricen comunicaciones de esta naturaleza a los líderes de organizaciones criminales’.
