Como neurólogo y epileptólogo de la Universidad de Michigan, Baibing Chen ha visto de primera mano los devastadores efectos que ciertos alimentos pueden tener sobre el sistema nervioso. Más allá de los típicos sospechosos como los alimentos procesados y las grasas saturadas, el experto advierte sobre cuatro alimentos sorprendentes que pueden causar daños cerebrales graves.
1. Comida Enlatada en Mal Estado
Una lata abollada o dañada podría ser señal de contaminación por botulismo, una neurotoxina producida por la bacteria Clostridium botulinum. «Esta toxina bloquea la liberación de un neurotransmisor que ayuda al cerebro a ordenar a los músculos que se muevan», explica Chen. El resultado puede ser parálisis de las extremidades, visión borrosa e incluso insuficiencia respiratoria.
Lo peor es que el botulismo es prácticamente imposible de detectar por el olor o el sabor, por lo que es crucial evitar cualquier lata que parezca estar en mal estado.
2. Peces Tropicales Grandes
Especies como el barracuda, el mero, el esturión, la morena y el pez limón pueden contener una neurotoxina llamada ciguatoxina, especialmente si fueron capturados en zonas con arrecifes de coral como el Caribe o el Pacífico Sur. Esto puede causar la infección por ciguatera, que afecta al sistema nervioso produciendo sensación de frío, ardor, hormigueo, mareos e incluso pesadillas intensas.
3. Carne de Cerdo Cruda o Poco Cocida
Consumir carne de cerdo insuficientemente cocinada puede provocar la neurocisticercosis, una enfermedad parasitaria del sistema nervioso central. Esto ocurre cuando se ingieren los huevos de la tenia del cerdo, cuyas larvas pueden viajar al cerebro y causar convulsiones, aumento de la presión intracraneal e incluso síntomas similares a la demencia.
4. Leche No Pasteurizada
La leche cruda o no pasteurizada puede contener peligrosos patógenos como listeria, E. coli y salmonela. Según Chen, beber leche sin pasteurizar puede causar hasta 45 veces más hospitalizaciones que la leche tratada térmicamente, y ha visto casos de «daños irreversibles al cerebro que provocaron convulsiones, meningitis y coma».
Si bien la pasteurización reduce ligeramente la concentración de algunas vitaminas, el experto afirma que el impacto es mínimo en comparación con los graves riesgos de la leche cruda.
Recuerda que, como neurólogo, Baibing Chen ha visto de primera mano los devastadores efectos que estos alimentos pueden tener sobre el sistema nervioso. Toma en serio sus advertencias y evita consumir estos cuatro peligrosos elementos para proteger la salud de tu cerebro.
