En un giro inesperado y perturbador, la caja negra del vuelo AI171 de Air India ha revelado que el capitán del avión, Sumeet Sabharwal, fue el responsable directo de la tragedia que cobró 260 vidas. Según informes de The Wall Street Journal, la grabación muestra que Sabharwal, un piloto con décadas de experiencia, apagó deliberadamente los interruptores que controlaban el flujo de combustible a los motores poco después del despegue.
El primer oficial, Clive Kunder, de apenas 30 años y con menos experiencia, quedó atónito ante la acción de su superior y entró en pánico al darse cuenta de lo que estaba sucediendo. Sin embargo, el capitán Sabharwal parecía estar tranquilo y sereno mientras el avión perdía potencia y se precipitaba hacia el desastre.
Un intercambio revelador entre los pilotos
El informe preliminar de la Oficina de Investigación de Accidentes Aéreos de la India ya había resumido el inquietante diálogo entre los dos pilotos, pero sin identificar quién dijo qué. Ahora, gracias a la información de la caja negra, se sabe que fue el capitán Sabharwal quien apagó los interruptores de combustible, a pesar de las preguntas y la sorpresa del primer oficial Kunder.
Según pilotos estadounidenses y expertos en seguridad aérea consultados, Kunder, como piloto activo del vuelo, probablemente estaba concentrado en controlar la aeronave durante el despegue, mientras que Sabharwal tenía las manos libres para observar y actuar.
¿Accidente o acto deliberado?
El informe preliminar no había determinado si el apagado de los interruptores fue un acto accidental o deliberado. Sin embargo, los nuevos detalles de la caja negra sugieren claramente que fue una acción intencional por parte del capitán Sabharwal.
Ahora las autoridades y los investigadores tendrán que determinar cuáles fueron las motivaciones y el razonamiento detrás de esta decisión tan trágica y devastadora. ¿Fue un acto de sabotaje? ¿Una falla mental? ¿Algún tipo de error de juicio catastrófico? Las respuestas a estas preguntas serán cruciales para prevenir que una tragedia similar vuelva a ocurrir.
Un legado de dolor y cuestionamientos
Para las familias de las 260 víctimas, esta revelación sin duda abrirá nuevas heridas y planteará más interrogantes sobre cómo y por qué sucedió esta tragedia. Mientras la investigación continúa, es imperativo que se tomen medidas urgentes para garantizar la máxima seguridad en la aviación y evitar que algo así vuelva a ocurrir.
El mundo de la aviación y la sociedad en general deberán reflexionar profundamente sobre cómo mejorar los procesos de selección, capacitación y monitoreo de los pilotos, para que incidentes tan devastadores no vuelvan a repetirse.