En un hecho que sacude a la nación, la Fiscalía General de Colombia ha confirmado el hallazgo de los cuerpos de ocho líderes sociales y religiosos en una fosa común en el departamento de Guaviare, al sur del país.
Según la investigación, estas personas fueron citadas por integrantes del frente Armando Ríos de las disidencias de las FARC «por sospecha de la posible creación de una célula» de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en la zona. Posteriormente, fueron trasladadas a un predio abandonado y asesinadas.
Víctimas Identificadas
Los cuerpos recuperados pertenecen a Jesús Valero, Carlos Valero, Marivel Silva, Isaid Gómez, Maryuri Hérnandez, Óscar Hernández, James Caicedo y Nixon Peñaloza Chacón, según el reconocimiento preliminar de sus familiares.
Investigación en Curso
La Fiscalía indica que los «victimarios al parecer recibieron la orden desde el círculo de confianza de alias ‘Iván Mordisco’ (jefe del EMC) para evitar la posible conformación de una célula del ELN en la región». Las autoridades continúan trabajando para esclarecer todos los detalles de este crimen y llevar a los responsables ante la justicia.
Impacto en la Comunidad
Este hecho ha generado una profunda conmoción en la comunidad, que lamenta la pérdida de líderes sociales y religiosos que dedicaban sus vidas a servir a los demás. Organizaciones de derechos humanos han exigido una investigación exhaustiva y la protección de los defensores comunitarios en la zona.
Llamado a la Acción
Ante este trágico suceso, es imperativo que las autoridades colombianas redoblen sus esfuerzos para garantizar la seguridad de los líderes sociales y religiosos, quienes desempeñan un papel fundamental en la construcción de una sociedad más justa y pacífica.
