La Municipalidad de Chillán se ha visto envuelta en un escándalo relacionado con el presunto mal uso de licencias médicas por parte de algunos de sus funcionarios. En medio de esta polémica, cuatro empleados han presentado su renuncia, marcando un punto de inflexión en la investigación y el compromiso de la administración por abordar este problema de manera transparente y responsable.
Renuncias y Transparencia
Según el alcalde Camilo Benavente, la municipalidad ha detectado entre 10 y 15 casos de posible abuso de licencias médicas, lo que ha llevado a la renuncia formal de cuatro funcionarios. Algunos de ellos han reconocido su responsabilidad en un «mea culpa», lo que demuestra la seriedad con la que se está abordando esta situación.
Benavente ha enfatizado la importancia de que las investigaciones avancen con rapidez y transparencia, con la designación de un fiscal encargado de recopilar los antecedentes necesarios. El objetivo es tener los resultados de los sumarios en un plazo de un mes, cumpliendo con la exigencia del Estado de actuar con prontitud.
Lecciones Aprendidas y Compromiso con la Gestión Pública
El alcalde reconoce que este proceso ha sido «tensionante» para la administración municipal, pero también ha destacado las lecciones importantes que se deben aprender. Según Benavente, el mundo jurídico a veces interpreta de manera distinta estas acciones, pero lo que el Estado exige es tener una administración rigurosa y procesos claros.
«No podemos permitirnos desprolijidades que afecten la confianza de la ciudadanía»
, enfatizó el alcalde, reafirmando el compromiso de la Municipalidad de Chillán con una gestión pública responsable y transparente.
Mientras tanto, las investigaciones continúan para determinar la responsabilidad de cada uno de los involucrados y garantizar que estas prácticas irregulares no vuelvan a repetirse. La Municipalidad de Chillán está decidida a restaurar la confianza de la comunidad y establecer un precedente claro en cuanto al uso apropiado de las licencias médicas.