Benjamín Netanyahu, el primer ministro israelí, se pronunció sobre el incidente ocurrido en Yenín, territorio palestino de Cisjordania ocupado ilegalmente por Israel, donde soldados israelíes dispararon contra una delegación de diplomáticos. Netanyahu calificó el hecho como un «accidente», asegurando que las tropas «no atacan a civiles».
En un videomensaje compartido en su cuenta de X, Netanyahu declaró: «Estamos en una intensa guerra de siete frentes, lanzada contra nosotros por Irán y sus aliados. A veces, en la guerra, ocurren accidentes
«. Según el mandatario, uno de estos «incidentes» ocurrió «el otro día en Yenín», donde afortunadamente «nadie resultó herido».
La versión oficial y la realidad de las víctimas civiles
El Ejército israelí, por su parte, acusó a la delegación diplomática de haberse «desviado de la ruta aprobada» y de haber disparado «tiros de advertencia» para distanciarlos. Sin embargo, esta versión contrasta con los datos sobre las víctimas civiles de la ocupación israelí en Cisjordania y Gaza.
Según un recuento de la agencia EFE y documentación de la ONG Defensa de Niños Internacional Palestina, solo en Cisjordania ocupada han sido asesinados al menos 27 menores de edad por fuego de soldados israelíes en lo que va de año. Mientras que en la Franja de Gaza han muerto al menos 16.503 menores de edad, incluidos más de 900 bebés que no habían cumplido un año de vida, desde la ofensiva bélica de octubre de 2023, según el Ministerio de Sanidad del enclave.
Reprimendas internacionales y llamados a la rendición de cuentas
El incidente en Yenín ha provocado reprimendas y que numerosos países convoquen a los embajadores israelíes para que den una explicación. Esto evidencia la creciente presión internacional sobre Israel por sus acciones en los territorios ocupados, donde la violencia y las violaciones a los derechos humanos parecen ser la norma, a pesar de las negativas y justificaciones del gobierno israelí.
En este contexto, la defensa de Netanyahu y su insistencia en que su ejército «no ataca a civiles» resulta difícil de creer, especialmente cuando los datos muestran una realidad mucho más cruda sobre las consecuencias de la ocupación israelí para la población palestina, incluidos los niños y niñas.
