El alcalde de Santiago, Mario Desbordes, ha revelado un preocupante aumento en los incidentes de violencia que se han registrado este año en los liceos emblemáticos de la comuna. Según sus declaraciones, se han presentado ataques con bombas molotov, amenazas a docentes e incluso una nueva amenaza de muerte dirigida al propio alcalde.
Desbordes afirmó que esta semana se han producido hechos de violencia en seis establecimientos educacionales a nivel nacional, asociados a grupos anarquistas. Por ejemplo, en el Instituto Nacional se lanzaron casi 600 molotov el año pasado, mientras que en el Internado Nacional Barros Arana (INBA) se registraron 180 ataques incendiarios y amenazas a asistentes de la educación.
El alcalde destacó que los incidentes de violencia han aumentado de manera significativa en comparación con años anteriores, lo cual representa un grave problema de seguridad para la comunidad escolar. Desbordes enfatizó que no vamos a tolerar que se desarrollen este tipo de actividades y mucho menos que dañen el transporte público que sirve a miles de vecinos y vecinas
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Acciones de las Autoridades
En el mismo punto de prensa, el seremi de Seguridad Pública Metropolitano, Jaime Fuentes, se refirió al incendio de un bus de la Red Metropolitana de Movilidad (RED) ocurrido en Cerro Navia. Fuentes informó que ya hay un detenido y que el OS9 de Carabineros trabaja para dar con los demás involucrados en este hecho.
Las autoridades han prometido tomar medidas enérgicas para proteger a la comunidad escolar y garantizar la seguridad en los establecimientos educacionales. Esto incluye reforzar la vigilancia, investigar a fondo los incidentes y aplicar sanciones a quienes resulten responsables.
Contexto Histórico
Cabe recordar que estos hechos de violencia se enmarcan en la conmemoración de la muerte del anarquista Mauricio Morales, ocurrida el 22 de mayo de 2009. En aquella ocasión, Morales falleció al colocar una bomba en la Escuela de Gendarmería.
La situación actual en los liceos emblemáticos de Santiago refleja un preocupante recrudecimiento de la violencia, lo cual representa un desafío importante para las autoridades y la comunidad educativa. Es fundamental que se tomen medidas efectivas para garantizar la seguridad y el bienestar de estudiantes, docentes y personal administrativo.
