En un mundo donde la codicia y el interés propio a menudo prevalecen, la historia de Karolay Carrillo, una joven barbera venezolana, es un refrescante recordatorio de la bondad y la integridad que aún existen en la sociedad.
Todo comenzó el 14 de octubre, cuando Karolay se encontró con un vale vista por nada menos que $19 millones tirado en un estacionamiento de Santiago Centro. En lugar de guardarlo para sí misma, su primera reacción fue de sorpresa, pero rápidamente envió un correo a la empresa cuyo nombre aparecía en el documento, con la intención de devolverlo a su legítimo dueño.
Una reunión inesperada y un regalo aún más sorprendente
Tras un contacto inicial algo complicado, Karolay logró concretar una reunión con el dueño del vale vista. Cuando finalmente se encontraron, el hombre no solo agradeció profundamente su honestidad, sino que le entregó un regalo muy especial como recompensa: un magnífico propóleo para el cuidado de la piel.
«Lo entregué y listo (…) El regalo… me entregó un propóleo, un magnífico, excelente propóleo para la piel. Yo estoy feliz», expresó Karolay con una sonrisa en su rostro.
Una historia que inspiró a la comunidad
La historia de Karolay se volvió viral en las redes sociales, generando una ola de reacciones positivas y felicitaciones de parte de la comunidad. Incluso algunos medios nacionales llegaron hasta su barbería para cubrir la noticia.
«Hay gente que me ha felicitado, buena energía, pero también hay gente que ha dicho otra cosa, pero bueno. Se logró, para algo sirve el internet, al menos hacemos cosas buenas», comentó Karolay.
En un mundo donde a menudo se prioriza el beneficio personal por encima de la honestidad, la acción de Karolay es un recordatorio de que la integridad y la bondad aún tienen un lugar en nuestra sociedad. Su historia ha inspirado a muchos y demuestra que, a veces, los pequeños gestos pueden tener un impacto mucho mayor de lo que imaginamos.
