El Gobierno, a través del Ministerio del Trabajo, ha publicado una nueva lista con más de 70 empresas que han sido declaradas como estratégicas y, por lo tanto, sus trabajadores no podrán ejercer el derecho a huelga. Esta medida se justifica, según el Ejecutivo, por la necesidad de asegurar la continuidad de servicios esenciales para la población.
Empresas del sector eléctrico, sanitario y de salud, entre otras, quedan prohibidas de hacer huelga. La lista incluye compañías como Aguas Andinas, CGE Transmisión, Chilquinta Transmisión y Distribución, Gasco, Enel Colina, Enel Distribución, Essbio, Esval, Metro Gas, el Banco Central, centros de diálisis y cuerpos de bomberos, entre otras.
Limitación del derecho a huelga en empresas estratégicas
Según el Gobierno, la Constitución establece que «no podrán declararse en huelga los funcionarios del Estado ni de las municipalidades» y tampoco «las personas que trabajen en corporaciones o empresas, cualquiera que sea su naturaleza, finalidad o función, que atiendan servicios de utilidad pública o cuya paralización cause grave daño a la salud, a la economía del país, al abastecimiento de la población o a la seguridad nacional».
En este contexto, el Ministerio del Trabajo señala que la limitación al derecho de huelga se justifica cuando «dicha medida es la interrupción en la continuidad de la prestación de servicios esenciales para la población en general».
Empresas eléctricas con áreas restringidas
Además, hay cuatro empresas del sector eléctrico donde solo se ha determinado que en ciertas áreas o faenas no se podrán realizar paralizaciones por huelga. Estas son Colbún, Enel Green Power Chile, Engie Energía Chile y Enel Generación Chile.
Por otro lado, algunas solicitudes de empresas para ser incluidas en la lista de estratégicas y quedar exentas del derecho a huelga fueron rechazadas, como es el caso de la AFP Uno, la Asociación de Municipios para la Seguridad Comunitaria, Nova Aguas, entre otras.
Esta medida del Gobierno busca asegurar la prestación ininterrumpida de servicios esenciales para la población, pero también ha generado debate sobre los límites al derecho fundamental a la huelga.