En una escena perturbadora captada en video, un agente del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) de Estados Unidos embistió y derribó a una mujer frente a los tribunales de inmigración en la ciudad de Nueva York.
La mujer, aparentemente la esposa de un inmigrante detenido por ICE, se acercó desesperadamente al agente para saber el paradero de su marido. Sin embargo, en lugar de responder con empatía, el funcionario la interrumpió abruptamente, la sujetó y la empujó hasta que impactó contra una pared, para finalmente arrojarla al suelo frente a sus hijos, gritando «¡Cállese, adiós!».
Condena de las autoridades locales
El contralor de la ciudad de Nueva York, Brad Lander, condenó enérgicamente el incidente, calificándolo como un «secuestro» y un acto de «violencia» por parte de los agentes de ICE. Lander denunció que los agentes, enmascarados y sin identificarse, detuvieron ilegalmente al esposo de la mujer sin presentar una orden judicial ni dar motivos legales.
«Segundos antes, su marido había sido secuestrado por agentes de ICE enmascarados que no se identificaron, no presentaron una orden judicial, no dieron ningún motivo legal para su detención», criticó Lander.
Llamado a la acción
Ante este incidente, el contralor Lander hizo un llamado a la comunidad a sumarse a una manifestación masiva en Foley Square esta noche, con el objetivo de dejar claro que «queremos que ICE salga de la ciudad de Nueva York».
«No vamos a dejar de aparecer hasta que dejen de secuestrar a nuestros vecinos», sostuvo Lander, quien condenó la violencia política y el trato inhumano que los agentes de ICE brindan a los inmigrantes.
Impacto en la comunidad
Este incidente ha generado indignación y preocupación en la comunidad inmigrante de Nueva York, quienes temen por la seguridad y los derechos de sus seres queridos frente a las acciones violentas de los agentes de ICE. Muchos exigen una reforma urgente en las políticas de inmigración y un mayor control sobre las prácticas de esta agencia federal.
La lucha por los derechos de los inmigrantes continúa, y este lamentable episodio ha puesto en evidencia la necesidad de abordar de manera integral los abusos y la falta de rendición de cuentas que persisten en el sistema de inmigración de Estados Unidos.
