En un sorprendente giro de los acontecimientos, la plataforma de video YouTube ha sacado del aire el canal del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que contaba con más de 233.000 suscriptores. Este hecho se produce en medio de la creciente tensión entre Caracas y Washington por el despliegue naval estadounidense en el Caribe, que Maduro ha denunciado como un intento de cambio de régimen en su país.
Según reportes, el canal de Maduro aparece listado en los motores de búsqueda, pero al intentar acceder a él, se muestra un mensaje que indica que «esta página no está disponible» y se pide disculpas por las molestias. El medio multiestatal Telesur señaló que el cierre del canal se produjo «sin explicaciones».
La relación conflictiva de Maduro con las redes sociales
Este no es el primer incidente entre Maduro y las plataformas digitales. En agosto de 2024, el mandatario venezolano ordenó la suspensión de la red social X (propiedad de Elon Musk) en su país durante 10 días. Desde entonces, X permanece bloqueada para los usuarios venezolanos.
Además, en ese mismo mes, Maduro acusó a los «dueños» de la red social TikTok (propiedad de Zhang Yiming) de promover una guerra civil en Venezuela. Posteriormente, el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela impuso una multa de 10 millones de dólares a TikTok por «negligencia» al no implementar medidas para evitar la difusión de retos virales que, según las autoridades, causaron muertes e intoxicaciones en varias escuelas del país.
Implicaciones y contexto geopolítico
La eliminación del canal de Maduro en YouTube se produce en un momento de gran tensión entre Venezuela y Estados Unidos. El despliegue naval estadounidense en el Caribe, justificado por la Casa Blanca como una medida para combatir el narcotráfico, ha sido denunciado por Maduro como un intento de cambio de régimen en su país.
Expertos consultados por EFE han señalado que, militarmente, Venezuela no tiene ninguna opción frente a la superioridad de Estados Unidos. Sin embargo, la disputa se extiende ahora al campo digital, con el cierre del canal de Maduro en YouTube, una plataforma clave para la comunicación y la propaganda del gobierno venezolano.
Este incidente se suma a los recientes conflictos de Maduro con otras redes sociales, lo que evidencia la creciente confrontación entre el gobierno venezolano y las principales plataformas digitales, en un contexto de tensión geopolítica con Estados Unidos.