En una operación conjunta entre la Fiscalía de Arica y la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado (Brianco) de la Policía de Investigaciones de Chile, se logró desarticular una red de tráfico de drogas que involucraba a dos policías peruanos.
La operación, denominada «Ruta Oculta», se enfocó en desmantelar una organización criminal que se dedicaba al ingreso de ketamina desde Perú hacia Chile, ocultando la droga en vehículos particulares. Tras un seguimiento, los agentes lograron interceptar a dos automóviles con placas peruanas que transportaban más de 11 kilos de ketamina.
Vehículos acondicionados para el tráfico de drogas
Según la subprefecta Geraldine Chacana, jefa (s) de la Brianco, los sospechosos «cambiaban periódicamente de vehículos y las placas patentes, y estos estaban acondicionados para el ocultamiento de droga en su interior». De hecho, en uno de los autos se encontraron los estupefacientes ocultos en el sector del «torpedo».
Además, se determinó que el segundo vehículo «prestaba cobertura y vigilancia ante la presencia policial en la ruta», mientras que el primero transportaba el cargamento de droga.
Dos policías peruanos entre los detenidos
Entre los cinco ciudadanos peruanos detenidos, se encontraban dos miembros de la Policía Nacional de Perú. Estos funcionarios fueron sorprendidos cuando ingresaban la ketamina a través del Complejo Fronterizo de Chacalluta, en la región de Arica y Parinacota.
Los imputados serán formalizados por el delito de tráfico ilícito de estupefacientes. Esta operación se enmarca en los esfuerzos de las autoridades por desarticular las redes de narcotráfico que operan entre Perú y Chile.
