Una investigación periodística ha destapado una trama de influencias y conflictos de interés que involucran al exprimer ministro británico Boris Johnson. Los archivos filtrados revelan que Johnson se habría beneficiado de su cargo para gestionar diversos intereses comerciales, incluyendo un encuentro secreto con el presidente venezolano Nicolás Maduro, tras el cual recibió un pago millonario.
Según los documentos obtenidos por la organización Distributed Denial of Secrets (DDoS), Johnson recibió 240.000 libras esterlinas (aproximadamente 258.800.000 pesos chilenos) de un fondo de cobertura después de reunirse con Maduro durante unas vacaciones familiares en República Dominicana. Aunque Johnson afirmó haber actuado como un canal diplomático secundario, la reunión, que duró alrededor de 2 horas, no fue notificada públicamente.
Contactos con Líderes Internacionales y Empresas Controvertidas
Los archivos filtrados también revelan que Johnson mantuvo reuniones secretas con otros líderes y empresarios influyentes, como el multimillonario alemán Peter Thiel, fundador de la controvertida firma de datos Palantir, y altos funcionarios saudíes. Esto sugiere que el exprimer ministro utilizó su posición para tejer una red de contactos y negocios lucrativos tras dejar el cargo.
Además, se encontraron evidencias de que Johnson infringió las normas de la pandemia de COVID-19 al organizar una cena para un lord conservador que financió una lujosa reforma de su apartamento en Downing Street, justo después de entrar en vigor el segundo confinamiento nacional.
Cuestionamiento de la Ética y el Cabildeo
Estas revelaciones ponen en duda la ética y transparencia de las actividades de Johnson después de dejar el cargo de primer ministro. Si bien los exlíderes pueden recibir fondos públicos para cubrir gastos derivados de su «posición especial en la vida pública», parece que Johnson los habría utilizado para fines privados y comerciales.
La investigación subraya la necesidad de mayor escrutinio y regulación de las actividades de los expolíticos, a fin de evitar conflictos de interés y el uso indebido de la influencia adquirida durante el ejercicio del poder.
