En un importante paso hacia la protección de la privacidad y los derechos de las mujeres, Facebook ha cerrado un polémico grupo en el que hombres compartían fotos íntimas de sus parejas sin su consentimiento. Este grupo, conocido como «Mia moglie» (mi esposa en italiano), había estado activo durante más de 6 años, acumulando una membresía de 32.000 usuarios.
La situación salió a la luz después de que la organización No Justice No Peace denunciara públicamente la existencia del grupo y las graves violaciones de privacidad que allí se cometían. Según la activista Carolina Capria, el grupo permitía a los miembros «intercambiar fotos íntimas de sus propias mujeres para comentar su aspecto y dar voz a sus fantasías sexuales», sin que muchas de ellas siquiera supieran que estaban siendo fotografiadas y expuestas.
Desde Meta, la empresa matriz de Facebook, confirmaron que no toleran «contenidos que promocionen la violencia, los abusos o la explotación sexual». Además, señalaron que si detectan «contenidos que incitan a la violación», pueden proceder a deshabilitar los grupos y cuentas involucrados, y compartir la información con las autoridades.
Imágenes editadas con Inteligencia Artificial
Según los informes, muchas de las imágenes compartidas en el grupo habrían sido editadas utilizando tecnologías de Inteligencia Artificial, lo que agrava aún más la violación de la privacidad de las mujeres afectadas. Esto demuestra que los abusos en línea van más allá de la simple divulgación de material íntimo, y pueden llegar a incluir la manipulación y distorsión de la imagen de las víctimas.
Persecución penal y grupos similares en otras redes
La organización No Justice No Peace ha anunciado que buscará perseguir penalmente a los responsables de este grupo. Además, señalan que existen grupos similares en otras redes sociales, como Telegram, lo que evidencia que este tipo de violaciones de privacidad y explotación sexual siguen siendo un problema generalizado en los espacios digitales.
Este cierre del grupo «Mia moglie» en Facebook representa un importante avance en la lucha contra la violencia de género en línea. Sin embargo, queda claro que aún queda mucho trabajo por hacer para erradicar por completo estas prácticas abusivas y garantizar la seguridad y el respeto a la privacidad de todas las mujeres en internet.
