En una operación de gran envergadura, la Policía de Investigaciones (PDI) y el Ministerio Público han logrado un importante golpe contra la trata de personas en Antofagasta. El operativo, denominado «Casa de Muñecas», permitió rescatar a 19 mujeres víctimas de explotación sexual, detener a 22 individuos de diferentes nacionalidades y decomisar más de $542 millones en efectivo y especies.
Según las autoridades, la investigación, que se extendió por más de un año, reveló que esta organización criminal de carácter transnacional estaba integrada por grupos con vínculos familiares que reclutaban a sus víctimas mediante engaños, ofreciéndoles trabajos como recepcionistas o en bares, para luego mantenerlas en cautiverio y privarlas de sus documentos de identidad.
Desarticulación de una Red de Trata de Personas
El operativo, liderado por la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado de Antofagasta, contó con la participación de más de 100 detectives provenientes de distintas regiones del país, incluyendo a la Brigada Investigadora de Trata de Personas y la Brigada Investigadora de Lavado de Activos (Brilac).
Según el jefe Nacional Contra el Crimen Organizado de la PDI, prefecto inspector Mauricio Jorquera Ramírez, «se logró rescatar a 19 víctimas que se encontraban bajo el flagelo de la trata de personas con fines de explotación sexual». Además, se incautaron 11 vehículos y diversas evidencias que dan cuenta del flujo de dinero y bienes patrimoniales asociados a esta organización criminal.
Golpe al Patrimonio de la Red Criminal
El fiscal regional, Juan Castro Bekios, destacó que durante la investigación se utilizaron todas las técnicas legales disponibles, tanto para acreditar los delitos vinculados a la trata de personas como para averiguar las ganancias ilícitas y el patrimonio de esta organización criminal.
«Con estas acciones, hemos neutralizado de manera significativa la capacidad patrimonial de esta red, dificultando su reactivación y continuidad operativa», afirmó el prefecto Jorquera Ramírez, resaltando el trabajo coordinado entre la PDI y el Ministerio Público.
Esta operación representa un importante avance en la lucha contra la trata de personas y el crimen organizado en la región de Antofagasta, demostrando el compromiso de las autoridades por desmantelar estas redes delictivas y proteger a las víctimas.
