En una contundente respuesta al líder del partido ultraderechista Vox, Santiago Abascal, el obispo de Tarragona y presidente de la Conferencia Episcopal Tarraconense (CET), Joan Planellas, ha dejado claro que «un xenófobo no puede ser un verdadero cristiano». Esto en referencia a las críticas de Abascal contra la Iglesia católica española por apoyar el derecho de culto de la comunidad musulmana tras el veto a las celebraciones islámicas en espacios deportivos aprobado en Jumilla (este).
Planellas cuestionó directamente: «¿Cómo puede ser xenófobo un católico? ¿Cuál es la posición del Evangelio sobre este punto? Hablar de xenofobia y vincularlo al catolicismo sería una cosa completamente fuera de lugar». El obispo emplazó al partido de Abascal a consultar la doctrina de la Iglesia sobre el acogimiento de personas migrantes y la dignidad de todos los seres humanos, algo que el difunto papa Francisco también reiteró de forma explícita.
La posición de la Iglesia sobre la migración
Planellas recordó que «la mayoría de migrantes lo son forzados» por situaciones y causas que les obligan a salir de su tierra, una situación que ha calificado de «muy grave». En este sentido, el obispo afirmó que no hay «fisuras» entre la posición de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y lo establecido en el Concilio Vaticano II (CVII) en materia migratoria, que es «la posición de la Iglesia sobre el tema».
Críticas al presidente de la CEE
El jefe de los obispos catalanes también expresó su malestar por el hecho de que el presidente de la CEE, Luís Argüello, se dejara fotografiar recientemente con Santiago Abascal en un acto. Planellas recordó que «el presidente de la CEE no actúa a título propio sino en nombre de todos los obispos».
La respuesta del obispo de Tarragona se produce en el contexto de la polémica desatada por la decisión del Ayuntamiento de Jumilla (Murcia, este) de prohibir en los polideportivos municipales los actos religiosos, culturales o sociales ajenos al consistorio, entre ellos las ceremonias del fin del Ramadán que la comunidad musulmana venía celebrando en las instalaciones. Ante esto, el Gobierno de Pedro Sánchez pidió al Ayuntamiento que revoque la medida, y la CEE respaldó a la comunidad musulmana, subrayando que la libertad de culto está amparada por la Constitución.