En un golpe contundente a la delincuencia organizada, la Brigada de Investigaciones Especiales y Antisecuestros (BIPE) de la PDI Metropolitana, liderada por el subprefecto Hassel Barrientos, ha desmantelado una peligrosa banda de secuestradores que operaba desde una casa de tortura en la comuna de Renca.
La investigación, coordinada con la Fiscalía del Equipo Contra el Crimen Organizado y Homicidios (ECOH), condujo a la detención de cuatro individuos, dos chilenos y dos venezolanos en situación migratoria irregular, quienes habrían participado en al menos dos secuestros extorsivos entre el 8 y 11 de agosto de 2025.
Evidencia Clave y Vínculos con Caso Montoya
Durante el allanamiento del inmueble en Renca, las autoridades encontraron una serie de elementos que aportaron directamente a la investigación, incluyendo teléfonos celulares robados, vestimentas y evidencia biológica, como una falange humana que se encuentra en peritaje en el Servicio Médico Legal.
Según el subprefecto Barrientos, las imágenes y comunicaciones de los secuestradores con sus víctimas en cautiverio permitieron establecer «fehacientemente este lugar como casa de tortura». Además, los dispositivos móviles incautados revelaron que la banda operaba múltiples delitos, desde extorsión hasta robo.
Asimismo, el fiscal Ernesto González, a cargo de la investigación del secuestro del exalcalde Gonzalo Montoya, logró vincular el domicilio de Renca con ese caso, determinando la identidad y participación de otro sujeto en el secuestro.
Modus Operandi y Víctimas Recientes
Según la información proporcionada por las autoridades, el modus operandi de la banda incluía agresiones físicas y amenazas para forzar pagos de las víctimas. En los casos recientes, una persona permaneció cautiva 70 horas tras ser secuestrada en Cerro Navia el 8 de agosto, mientras que otra, afectada el 11 de agosto, estuvo retenida solo cuatro horas, pero fue obligada a transferir dinero y entregar su vehículo.
El fiscal Milibor Bugueño confirmó que «la víctima del día viernes tiene lesiones de consideración», y que las autoridades mantienen contacto con las víctimas liberadas, cuyas identidades se mantienen bajo extrema reserva.
Operativo Coordinado y Detenciones
El operativo policial, resultado de la coordinación entre la Fiscalía ECOH, la PDI y Carabineros, permitió vincular los hechos y desarticular a la banda criminal. Dos de los detenidos, ambos de nacionalidad chilena, quedaron en prisión preventiva tras su formalización el 12 de agosto, mientras que los otros dos serán formalizados el 14 de agosto.
El subprefecto Barrientos destacó que el operativo respondió a secuestros ocurridos el 10 y 11 de agosto, no directamente al caso Montoya. Sin embargo, el cruce de datos entre las diferentes agencias fue clave para desbaratar a esta peligrosa banda de secuestradores que operaba de manera «multi delito».
Conclusión: Golpe Contundente a la Delincuencia Organizada
Este operativo representa un importante avance en la lucha contra la delincuencia organizada en la Región Metropolitana. La desarticulación de esta banda de secuestradores, vinculada a múltiples delitos incluyendo el secuestro del exalcalde Montoya, envía un mensaje claro de que las autoridades están determinadas a combatir este tipo de amenazas a la seguridad ciudadana.
