En octubre de 2018, la vida de Grace Spence Green cambió en un segundo. Lo que prometía ser una tarde cualquiera en un centro comercial en Londres terminó marcando un antes y un después en su historia, que acaba de quedar plasmada en la publicación de su libro «To Exist As I Am».
Con 22 años y en el cuarto año de medicina, Grace se despedía de una amiga junto a unas escaleras mecánicas. Minutos después, un hombre cayó desde más de 40 metros de altura directamente sobre su espalda. La joven despertó rodeada de extraños, sin poder mover las piernas.
De la Negación a la Aceptación
Aquel hombre, que intentó quitarse la vida lanzándose desde el tercer piso del centro comercial, no murió. Pero su caída dejó a Grace con múltiples fracturas, incluyendo la columna vertebral y la caja torácica. El daño a su médula espinal la dejó paralítica.
«Recuerdo gritar y no poder sentir mis piernas», contó Grace años más tarde. «Veía que no había sangre ni heridas visibles. Me costaba aceptar que estaba paralizada».
La negación fue su primera respuesta. Aunque estudiaba medicina, le resultaba imposible aceptar que ahora era una paciente más, una persona con discapacidad. Intentó por meses aferrarse a la idea de que volvería a caminar, como en las películas. «Quería ser una de esas historias de superación, salir caminando de la clínica, pero no era mi camino», reflexiona.
Encontrando Fortaleza en la Adversidad
Grace pasó por un intenso proceso de rehabilitación física y emocional. Empezó a escribir todo lo que sentía, a diario, en un documento de Word. Poco a poco, comenzó a comprender que su valor no dependía de volver a caminar. Que su vida, aunque distinta, no estaba acabada.
«Empecé a seguir a personas discapacitadas en redes sociales. Ver que llevaban vidas normales fue revelador. Yo también podía hacerlo», dijo en conversación con BBC Mundo.
De Paciente a Médica Más Empática
Hoy, Grace trabaja como médico y cree que su experiencia la hace más empática con sus pacientes: «Ellos saben que yo también he estado del otro lado».
Sobre el hombre que cayó sobre ella, sabe poco y no quiere saber más. Dice que no lo odia, pero que tampoco lo perdona. «Fue tan aleatorio, que no siento ira. Solo quiero vivir mi vida».
La historia de Grace Spence Green es una poderosa muestra de resiliencia y determinación. A pesar de enfrentar una tragedia devastadora, logró transformar su vida y ahora inspira a otros con su ejemplo de fortaleza y superación.