El Kremlin ha calificado de «muy seria» la declaración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien anunció un ultimátum de 50 días a Rusia para que logre un acuerdo con Ucrania. Sin embargo, el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, pidió esperar la reacción del líder ruso, Vladímir Putin.
Trump amenazó con imponer a Rusia «aranceles muy severos» si no se alcanza un acuerdo de paz con Ucrania en ese plazo de 50 días. Además, confirmó nuevos suministros de armas a Kiev, incluyendo los sistemas antimisiles Patriot solicitados por el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
Escalada de Tensiones entre EE.UU. y Rusia
Según Peskov, la declaración de Trump «es muy seria» y parte de ella iba dirigida personalmente al presidente Putin. El portavoz ruso señaló que Moscú necesita tiempo para analizar lo dicho en Washington y que, si Putin lo considera «necesario», hará una declaración al respecto.
Por otro lado, Peskov aseguró que las decisiones de Estados Unidos y la OTAN, en referencia al suministro de armamento a Ucrania, «animan a Kiev a seguir combatiendo» en lugar de buscar la paz. Además, recordó que aún no ha llegado la propuesta de Kiev para celebrar la tercera ronda de negociaciones directas, aunque Moscú sigue dispuesto a participar.
Sanciones Económicas como Arma de Presión
Según un funcionario de la Casa Blanca, cuando Trump habló de «aranceles secundarios», se refería a un arancel del 100% a Rusia y sanciones secundarias a quienes compren petróleo ruso, como China e India. Esta medida económica busca forzar a Rusia a llegar a un acuerdo de paz con Ucrania.
Trump también acusó a Putin de «engañar» a los anteriores presidentes de Estados Unidos, pero aseguró que a él «no lo engañará».
Llamado a la Diplomacia y la Negociación
A pesar de la dureza del ultimátum de Trump, el Kremlin ha pedido esperar la reacción de Putin y mantener la vía diplomática abierta. Moscú sigue dispuesto a participar en las negociaciones de paz, aunque por ahora no está dispuesto a declarar un alto el fuego.
La escalada de tensiones entre EE.UU. y Rusia en torno al conflicto ucraniano pone de manifiesto la necesidad urgente de retomar el diálogo y encontrar una solución negociada que ponga fin a las hostilidades.
