En un tenso intercambio en el programa Buenos días a todos, los presentadores Monserrat Álvarez y Eduardo Fuentes se enfrentaron a la compleja cuestión de la violencia masculina, tras un incidente de doble homicidio ocurrido en Colina.
Álvarez, adoptando una «postura feminista», señaló que la violencia callejera con armas de fuego es protagonizada en un 99% por hombres. Fuentes, por su parte, reconoció que existe una «propensión a la violencia» entre los hombres, atribuyéndolo a una cuestión cultural de cómo se les enseña a resolver conflictos «a combos» desde pequeños.
Más Allá de la Criminalización
Si bien ambos coincidieron en que este tipo de violencia es inaceptable, Álvarez enfatizó la necesidad de abordar el problema de raíz, más allá de la mera criminalización. «Hay que mirar también que hoy día es una realidad (…) este tipo de violencia con arma en mano es protagonizada por hombres, ¿qué vamos a hacer con los hombres?, ¿qué vamos a hacer para que entiendan que tenemos que solucionar los problemas de otra manera?».
Fuentes, por su parte, reconoció que se trata de un «fenómeno mucho más complejo» que requiere soluciones culturales a largo plazo, como la «educación emocional» y la generación de «oportunidades» para los hombres. «Hay que hacer cosas hoy», insistió, señalando que las soluciones a largo plazo no interesan a nadie.
Hacia una Sociedad Más Equitativa y Pacífica
Álvarez coincidió en que las soluciones culturales tardan tiempo, pero enfatizó la necesidad de abordar el problema desde múltiples frentes, incluyendo la educación y la creación de oportunidades, además de la aplicación de la ley. «Algo pasa con la reacción masculina», afirmó, señalando que los tiroteos masivos en Estados Unidos son perpetrados casi exclusivamente por hombres.
Finalmente, Fuentes buscó distender el ambiente, bromeando sobre sacar una pistola, y enfatizando que, a pesar de las diferencias, ambos se quieren tanto como el día anterior. Sin embargo, la discusión dejó en claro la urgencia de abordar la violencia masculina de manera integral, más allá de la simple criminalización, para construir una sociedad más equitativa y pacífica.