La Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) se enfrenta a una grave denuncia por parte del Sindicato de Futbolistas Profesionales (Sifup). Según el gremio, la ANFP habría incumplido un mandato de la FIFA para implementar un sistema de regulación sobre los préstamos de jugadores.
En 2022, la FIFA emitió un instructivo que otorgaba tres años a las asociaciones nacionales para consensuar, junto a los grupos de interés, normas que obedecieran a los principios de integridad de las competiciones y desarrollo juvenil, evitando el acaparamiento de jugadores. Sin embargo, la ANFP, liderada por Pablo Milad, habría desestimado dichos principios y no se habría contactado con el Sifup ni otros grupos de interés definidos por la FIFA.
Desde el sindicato, presidido por Gamadiel García, acusan a la dirigencia de la ANFP de actitud negligente y contradictoria, al no obedecer las políticas de desarrollo y transparencia solicitadas por la FIFA. Incluso denuncian que, en paralelo, se estaría imponiendo una «política del terror» con amenazas de sanciones al país por avances legislativos que buscan separar a la ANFP de la Federación de Fútbol de Chile.
El Sifup cuestiona las verdaderas intenciones del actual directorio de la ANFP, liderado por Milad y Yungue, al desestimar una de las pocas normas que exige la FIFA para trabajar en conjunto con los grupos de interés nacionales.
Esta grave denuncia pone en evidencia el incumplimiento de la ANFP ante un mandato clave de la FIFA, lo que podría tener serias implicaciones para el fútbol chileno si no se toman las medidas correctivas necesarias.