En un hecho sin precedentes, el Fiscal Nacional, Ángel Valencia, ha confirmado la destitución de dos fiscales del Ministerio Público, uno de ellos Jorge Mena, exfiscal de Rancagua, quien enfrentaba investigaciones por presuntos vínculos con el narcotráfico.
Según Valencia, la decisión de remover a Mena se debió a una investigación administrativa sobre el incumplimiento de sus deberes funcionales en la tramitación de causas a su cargo. Específicamente, se le acusaba de negociar irregularmente con abogados defensores de narcotraficantes, llegando a acuerdos para aplicar procedimientos abreviados, reducir cargos y facilitar la expulsión de extranjeros, evitando así mayores condenas.
Alerta en el Juzgado de Garantía
Fuentes anónimas denunciaron que Mena habría negociado exclusivamente con ciertos abogados defensores privados en causas relacionadas con el narcotráfico, lo que generó situaciones anómalas en los procedimientos abreviados en los que participaba.
Esto habría puesto en alerta a los Juzgados de Garantía, que habrían observado irregularidades en los acuerdos a los que llegaba el fiscal Mena con estos abogados.
De la Fiscalía Antidrogas a Robos
Tras su suspensión en 2024, Mena fue trasladado de la cartera de drogas y homicidios a la de robos en la Fiscalía, lo que generó malestar entre defensores públicos y privados, quienes denunciaron esta decisión.
Investigación Administrativa y Remoción Permanente
Según el Fiscal Nacional, la investigación administrativa contra Mena y el otro fiscal removido de Magallanes tenía que ver con el incumplimiento de sus deberes funcionales, lo que llevó a la destitución permanente de ambos funcionarios.
Este caso pone de manifiesto la importancia de mantener la integridad y transparencia en el sistema de justicia, y la necesidad de investigar y sancionar severamente cualquier indicio de corrupción o vínculos con el crimen organizado por parte de los servidores públicos.
