En un esfuerzo conjunto entre la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (ABIF) y el Ministerio Público de Chile, se ha logrado un golpe contundente contra el crimen organizado. La ABIF ha reafirmado su compromiso de continuar cooperando con las autoridades en la lucha contra redes criminales que amenazan la seguridad del país y la integridad del sistema financiero.
Según los detalles revelados, la Policía de Investigaciones (PDI) detuvo a al menos 52 personas extranjeras que habían logrado acumular un patrimonio a través de actividades ilícitas como tráfico de drogas, secuestro, extorsión, trata de personas y amenazas. Estos individuos, actuando como testaferros con residencia en Chile, lograron ingresar estos fondos ilícitos al sistema bancario y luego sacarlos paulatinamente del país a través de criptomonedas.
Un Acuerdo Clave para Agilizar Investigaciones
En julio de 2024, el Ministerio Público y los bancos suscribieron un acuerdo con el objetivo de lograr agilidad en la entrega de información bancaria autorizada por los tribunales a los fiscales a cargo de investigaciones complejas, como aquellas relacionadas con homicidios, secuestros o crimen organizado. Este convenio ha sido fundamental para el éxito de la reciente operación que desmanteló el brazo financiero del Tren de Aragua.
Compromiso Inquebrantable de la Banca
Desde la ABIF, se ha reiterado la disposición de seguir contribuyendo con las autoridades, en el marco de la legalidad vigente, a fin de avanzar en el combate a las redes criminales que amenazan la seguridad del país y la integridad del sistema financiero. El fiscal nacional, Ángel Valencia, ha valorado públicamente el rol clave que ha desempeñado la banca en esta operación.
Este caso demuestra que la colaboración estrecha entre el sector financiero y las autoridades judiciales es fundamental para desarticular las complejas estructuras del crimen organizado. Al privarles del acceso a los sistemas bancarios, se les priva de una herramienta vital para blanquear sus ganancias ilícitas y expandir sus actividades delictivas.
La determinación de la banca chilena y el Ministerio Público en esta lucha envía un mensaje claro a las organizaciones criminales: no hay lugar seguro para ocultar sus fondos. Este golpe al Tren de Aragua representa un importante avance en la protección de la seguridad y la integridad financiera del país.
