Tras 25 años de espera, los New York Knicks han logrado clasificarse a la final de la Conferencia Este de la NBA. En una serie apasionante, los Knicks demostraron su calidad y superioridad al barrer a los Boston Celtics, los vigentes campeones de la liga, por 4-2.
El partido decisivo fue una verdadera exhibición de los Knicks, que se impusieron por un contundente marcador de 119-81. Liderados por Jalen Brunson, quien aportó 23 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias, y con la solidez defensiva de OG Anunoby, los neoyorquinos dominaron el juego desde el inicio y no dieron opción a una remontada de los Celtics.
Además, Josh Hart se convirtió en el tercer jugador de la historia de los Knicks en conseguir un triple-doble en playoffs, algo que no se lograba desde Walt Frazier en 1972. Con 10 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias, Hart fue clave en la contundente victoria de su equipo.
La lesión de Jayson Tatum, estrella de los Celtics, en el cuarto partido de la serie, fue un duro golpe para el equipo de Joe Mazzulla. Sin su principal referente, los Celtics no pudieron hacer frente a la intensidad y el juego coral de los Knicks, que los superaron en todos los aspectos del juego.
Ahora, los Knicks se enfrentarán a los Indiana Pacers en la final de Conferencia, en una serie que promete ser apasionante. Será una oportunidad de revancha para los neoyorquinos, quienes fueron eliminados por los Pacers en la segunda ronda de los playoffs del año pasado.
Para los aficionados de los Knicks, este momento es histórico. Después de décadas de sequía, su equipo ha vuelto a alcanzar una final de Conferencia, lo que les ilusiona con la posibilidad de volver a las Finales de la NBA, algo que no ocurre desde 1999.