Israel ha iniciado negociaciones con varios países africanos para reubicar a palestinos que residen en la Franja de Gaza, según informaron funcionarios israelíes. Esta medida se enmarca en los esfuerzos del gobierno de Benjamin Netanyahu por desplazar a una gran cantidad de la población palestina del enclave, incluso enviándolos a naciones ubicadas a miles de kilómetros de distancia.
De acuerdo a los reportes, el Mossad, la agencia de inteligencia exterior de Israel, ha sido encargada de encontrar países que acepten recibir a un gran número de palestinos desplazados de Gaza. Hasta el momento, se han mantenido conversaciones con Somalia y Sudán del Sur, dos naciones empobrecidas y afectadas por conflictos internos, para explorar la posibilidad de acoger a estos refugiados.
Propuesta de Expulsión Masiva
Esta iniciativa se produce luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, propusiera expulsar a los dos millones de palestinos de Gaza para reconstruir el enclave. Si bien esa propuesta no prosperó, el gobierno israelí parece estar buscando formas alternativas de reubicar a una gran cantidad de la población palestina.
Según un exfuncionario estadounidense, Israel también ha estado considerando la opción de enviar a los gazatíes a otros países, como Indonesia.
Reacciones Internacionales
La noticia ha generado preocupación y rechazo en la comunidad internacional. Tanto Egipto como Qatar han condenado enérgicamente la creación de una agencia israelí para gestionar la «salida voluntaria» de la población palestina de Gaza hacia otros países.
Egipto enfatizó que cualquier salida que ocurra «bajo los bombardeos y la guerra, en medio de políticas que obstruyen la ayuda humanitaria y utilizan el hambre como arma, constituye un desplazamiento forzado, un delito y una violación del Derecho Internacional». Por su parte, Qatar señaló que «cualquier forma de desplazamiento palestino constituye una flagrante violación del Derecho Internacional Humanitario».
Situación Humanitaria en Gaza
Cabe destacar que la Franja de Gaza se encuentra en una grave crisis humanitaria. Según el Ministerio de Salud de Gaza, controlado por Hamás, alrededor del 90% de los residentes del enclave han sido desplazados por la guerra, mientras que más de 50.000 han fallecido.
A pesar de esta dramática situación, muchos gazatíes se oponen firmemente a cualquier intento de expulsarlos de su tierra natal. Ante las revelaciones sobre las negociaciones de Israel, la comunidad internacional ha exhortado a la adopción de una posición firme contra estas «continuas violaciones y provocaciones israelíes».
El futuro de los palestinos de Gaza permanece incierto, mientras Israel parece empeñado en encontrar formas de desplazar a una gran parte de la población del enclave, incluso a través de acuerdos con países africanos.