La Universidad Austral de Chile (UACh) se enfrenta a graves consecuencias legales si procede con el cierre de la sala cuna que mantiene para sus funcionarios. Según informó el Seremi de Educación de Los Ríos, Juan Pablo Gerter, la casa de estudios podría enfrentar una multa de hasta 250 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), es decir, más de $13 millones, además de quedar inhabilitada de forma permanente para ejercer como sostenedora de establecimientos de educación parvularia.
Esta situación se genera luego de que la UACh anunciara el cierre de su jardín infantil y sala cuna, lo cual ha generado preocupación entre las autoridades educativas. Gerter señaló que la solicitud de renuncia al reconocimiento oficial que permite el funcionamiento de estos servicios no se ajusta a los plazos establecidos por el Ministerio de Educación, por lo que han llamado a la universidad a reconsiderar esta decisión y mantener al menos la sala cuna abierta.
Sanciones Millonarias y Pérdida de Habilitación
Según detalló el Seremi de Educación, en caso de que la UACh insista en cerrar la sala cuna, sus representantes legales o administradores podrían ser inhabilitados de forma perpetua para ejercer como sostenedores de educación parvularia. Además, enfrentarían una sanción monetaria que podría llegar hasta las 250 UTM, es decir, más de $13 millones.
Esta situación mantiene en suspenso el futuro de las trabajadoras de la sala cuna, los párvulos que asisten y sus apoderados, quienes a su vez son empleados de la universidad. Ante esto, el Seremi de Educación ha programado una reunión esta semana con la Rectoría de la UACh para abordar el tema y buscar una solución que evite las graves sanciones.
Evaluación Jurídica en Curso
Según informaciones previas, la UACh había señalado que sus equipos jurídicos estaban evaluando lo planteado por el Ministerio de Educación. Sin embargo, hasta el momento no se ha emitido un pronunciamiento público sobre el futuro de la sala cuna.
Esta situación pone en evidencia la importancia que tienen estos servicios de cuidado infantil para los trabajadores de la universidad, y la necesidad de que las autoridades educativas y la propia UACh busquen una solución que permita mantener este beneficio sin exponer a la institución a sanciones millonarias y la inhabilitación permanente para operar jardines infantiles.
