La semana pasada se inauguró la nueva cárcel La Laguna de Talca, ubicada en el sector Panguilemo, a 10 kilómetros del centro de la ciudad. Este evento, encabezado por el presidente Gabriel Boric, marca el estreno de la novena unidad concesionada al sistema penitenciario de Chile y la primera desde 2013, cuando abrió el Centro Penitenciario de Antofagasta.
Un Recinto Moderno y Tecnológicamente Avanzado
Con una superficie superior a los 63.500 metros cuadrados y una inversión de $56 millones de dólares, el recinto de Talca se ha posicionado como el más moderno de Sudamérica, con capacidad para albergar a un máximo de 2.320 internos. Durante esta primera etapa, el espacio habilitado considera una capacidad de 424 reclusos, que aumentará gradualmente hasta su habilitación total.
La nueva cárcel cuenta con 14 módulos de reclusión que permitirán separar a las personas según su calidad procesal (condenados o imputados), nivel de compromiso delictual, condiciones especiales y género. Además, su tecnología de punta la convierte en líder en Latinoamérica en la gestión de vigilancia y seguridad, con más de 1.500 cámaras de vigilancia de alto estándar, 30 detectores de metales, tres escáneres corporales, tres equipos de detección de drogas y explosivos, y un sistema de gestión de telecomunicaciones para bloquear el uso de teléfonos celulares.
Un Enfoque Integral en la Reinserción Social
A diferencia de otros centros penitenciarios, la nueva cárcel de Talca dispone de un sistema de reinserción social en manos del Estado, a través de especialistas de Gendarmería, instruidos por un modelo diseñado por el Ministerio de Justicia. Además, contará con la cooperación de entidades privadas que reforzarán la reinserción con servicios que incluyen programas de capacitación laboral, educación, deporte, recreación, arte y cultura.
Entre las instalaciones destinadas al bienestar de los reclusos se encuentran una escuela centralizada con distintos niveles educacionales, un centro de Tratamiento de Adicciones y un área de salud para medicina general, especialidades, atención dental y hospitalizaciones.
Descongestionar y Mejorar las Condiciones Carcelarias
La nueva cárcel de Talca cumple con el propósito de descongestionar la actual cárcel en la Alameda de Talca, que cuenta con 920 internos y un 99% de sobrepoblación. Los reclusos de esta antigua penitenciaría serán los primeros en ser trasladados a la moderna instalación, lo que permitirá mejorar significativamente las condiciones de reclusión y promover un enfoque más efectivo en la rehabilitación y reinserción social de los internos.
En resumen, la inauguración de la cárcel de Talca representa un hito en el sistema penitenciario de Chile, al ofrecer una infraestructura de vanguardia, tecnología de seguridad de punta y un modelo integral de reinserción social que busca ser un referente en Latinoamérica.
