Después de tocar la barrera psicológica de los $1.000, el dólar logró recuperarse y ceder parte de sus ganancias en una jornada marcada por la volatilidad y las perspectivas económicas de Estados Unidos.
La Reserva Federal y su Impacto en el Dólar
La Reserva Federal (Fed) se mostró más restrictiva de lo esperado en cuanto a futuras bajas de las tasas de interés para 2025. Esto, sumado a la última revisión al alza del PIB estadounidense, que creció un 3,1% en el tercer trimestre, generó un giro en la política monetaria y enfrió las expectativas de nuevos recortes de tasas, lo que redujo la debilidad del dólar a nivel global.
Perspectivas Económicas y Riesgos Emergentes
Si bien el crecimiento económico de EE.UU. es un dato favorable, también refuerza la idea de que la Fed no necesita ser agresiva con futuros recortes de tasas, limitando así la debilidad del dólar. Sin embargo, los inversores muestran preocupación por la creciente probabilidad de un cierre de gobierno en EE.UU., debido al aumento en la deuda fiscal del país.
Impacto en el Mercado de Commodities
Paralelamente, los futuros del cobre han mostrado una considerable caída de 2,05% hasta los US$4,07 la libra, alcanzando su menor valor desde mediados de noviembre. Esto se debe, en parte, a la fortaleza del dólar, que tiende a presionar a la baja los precios de los commodities cotizados en esa moneda.
Conclusión: Volatilidad y Perspectivas Mixtas
En resumen, la jornada se ha caracterizado por una alta volatilidad en el tipo de cambio del dólar, influenciada por las decisiones de la Reserva Federal y los datos económicos recientes de Estados Unidos. Mientras que el crecimiento del PIB es un factor positivo, los riesgos emergentes, como la posibilidad de un cierre de gobierno, generan incertidumbre y presionan al alza el valor del dólar, con impactos en el mercado de commodities.
