Boric y Vallejo Defienden la Igualdad Ante la Ley: Un Llamado a la Justicia Ciega
En un momento de intenso debate político, la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, ha salido en defensa de los recientes comentarios del Presidente Gabriel Boric sobre el Caso Audios y la prisión preventiva decretada para el abogado Luis Hermosilla. Vallejo ha reafirmado el compromiso del Gobierno con la aplicación justa de la ley, sin privilegios ni excepciones.
Igualdad Ante la Ley: Un Principio Fundamental
Según Vallejo, el Presidente Boric ha sido claro en su posición: cuando nos enfrentamos a la justicia, todos tienen que ser iguales ante la ley. Esto significa que no debe importar la cuna, las redes de poder, el poder adquisitivo del dinero, la militancia o el sector político. La ministra afirma que la justicia no debe generar tratamientos privilegiados para nadie, ya sea por corrupción o cualquier otro delito.
Reacción Diferenciada a las Palabras del Presidente
Vallejo señala que la reacción de la oposición a los comentarios de Boric sobre el Caso Hermosilla ha sido distinta a la que se ha presentado en otros casos, como el de los Convenios o las prisiones preventivas de delincuentes comunes. Según la ministra, esto demuestra que el Presidente mantiene una posición coherente, respaldada por el Gobierno, en la que la ley debe ser igual para todos.
Un Llamado a la Justicia Ciega
En resumen, la posición del Gobierno, a través de la voz de la ministra Vallejo, es clara: la justicia debe ser ciega ante las diferencias de cuna, poder o recursos. Esto implica que todos los casos deben ser tratados con el mismo rigor y sin privilegios, independientemente de la posición social o política de los involucrados. Este es un llamado a la aplicación justa y equitativa de la ley, un principio fundamental en una sociedad democrática.
Conclusión
La defensa de Vallejo a los dichos de Boric sobre el Caso Audios y la prisión preventiva de Hermosilla refleja el compromiso del Gobierno con la igualdad ante la ley. Este es un mensaje claro y contundente que busca reafirmar la importancia de la justicia ciega y la aplicación equitativa de la ley, sin importar la posición o el poder de los involucrados. Es un llamado a la transparencia y la rendición de cuentas, valores esenciales para fortalecer la confianza en las instituciones y el Estado de Derecho.