La debacle del PDG: colectividad mantiene sólo una diputada tras expulsión de Gaspar Rivas
“Ya varios ratones han salido y los vamos a seguir sacando. Y aquellos que se quedan, gatos pillos, también los vamos a sacar”. Con esas palabras, el fundador y ex candidato presidencial del Partido de la Gente (PDG), Franco Parisi, celebró la expulsión del diputado Gaspar Rivas de la colectividad.
La decisión del Tribunal Supremo del PDG ocurrió luego que el parlamentario fuese electo como primer vicepresidente de la Cámara de Diputadas y Diputados, compartiendo la testera con Karol Cariola (PC) y Eric Aedo (DC). Sin embargo, la expulsión respondió a una denuncia realizada por militantes del partido en agosto pasado y se vio acelerada por los movimientos en la mesa de la Corporación. Según el tribunal, tras un proceso interno ―en que el diputado no se manifestó― quedó “en evidencia que el señor Gaspar Rivas infringió la Declaración de Principios y los Estatutos del Partido de la Gente”.
La merma del PDG en la Cámara de Diputados
En noviembre de 2021, el PDG se enfrentó a su primera elección parlamentaria, en la que obtuvo seis diputados y un 8,45% de los votos para el periodo 2022-2026. En paralelo, a nivel presidencial, Franco Parisi alcanzó el tercer lugar en la primera vuelta, ubicándose por sobre candidatos como Sebastián Sichel (IND-ChV), Yasna Provoste (DC) y Marco Enríquez-Ominami (PRO).
Sin embargo, a pocos meses de entrar al Congreso, comenzó la sangría de la colectividad. El 13 de diciembre de 2022, los diputados Francisco Pulgar, Yovana Ahumada y Víctor Pino hicieron pública su renuncia al partido. En un punto de prensa, los parlamentarios acusaron a la directiva del PDG de abandonar “las conversaciones por el proceso constituyente”. Además, reclamaron que “el partido se fue hacia un lado”.
Dos semanas después, la Cámara de Diputados decidió disolver la bancada del Partido de la Gente, pues la tienda perdió la mayoría en el comité parlamentario que también integraban independientes. La cuarta renuncia ocurrió el 8 de abril de 2024. Ese día, en un podio instalado en el Congreso Nacional, el diputado Rubén Oyarzo anunció que dejaba el PDG. “Esta decisión se sustenta en la ausencia de proyecto político, la nula capacidad de la organización y el maltrato de la colectividad a sus propios parlamentarios”, argumentó. “Quienes hoy dirigen el partido han tomado decisiones erráticas, se han aislado, como parlamentarios nos han aislado, demostrando que no tienen conducción organizacional. Chile no conoce sus propuestas porque el Partido de la Gente no las tiene”, aseguró Oyarzo.
La última salida fue la de Gaspar Rivas, quien fue cuestionado luego de asegurar en una entrevista que el ministro secretario general de la Presidencia, Álvaro Elizalde, le ofreció un cupo en la mesa de la Cámara. Aunque se retractó, sus dichos generaron tensión en la Corporación y motivaron una moción de censura impulsada por sectores del Partido Republicano y el Partido Social Cristiano.
Karen Medina, la última diputada del Partido de la Gente
La expulsión de Gaspar Rivas dejó al Partido de la Gente con una sola diputada. Se trata de Karen Medina (PDG), quien lidera la disidencia de la tienda y competirá por la presidencia del partido en las elecciones internas que se realizarán el 27 de abril.
Sin embargo, el de Medina es un nombre incómodo para la colectividad. A fines de enero de 2024, la parlamentaria se querelló en contra del presidente del PDG, Luis Moreno. En la acción legal, que continúa vigente, acusó al timonel de falsificación de instrumento privado y obtención ilegal de subvenciones del Fisco. Según el documento, Moreno habría falsificado firmas para llegar a ser representante legal del PDG. De esa manera, pudo administrar por dos años los fondos que entregó el Servicio Electoral (Servel), que ascenderían a más de $1.300 millones. La diputada aseguró, además, que las actas de procesos electorales también fueron adulteradas por el presidente del partido.
En conversación con The Clinic, Karen Medina comentó que “hay una cosa principal en todo mi actuar: nosotros llegamos a hacer una política distinta y a hacer las cosas bien. Si eso significa fiscalizar mi propio partido porque está haciendo cosas irregulares, yo lo voy a hacer”. “Estoy súper tranquila. Por lo mismo, he permanecido en el partido. Voy a seguir en el partido”, enfatizó.