Introducción
La necesidad de una reforma al sistema político en nuestro país es cada vez más evidente. Diversos actores políticos y expertos han manifestado su preocupación y han llamado a tomar medidas urgentes para mejorar nuestra democracia. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la crisis de nuestra institucionalidad pública no se limita solo al Congreso y a los partidos políticos. En este artículo, analizaremos los problemas que enfrenta el Estado en su conjunto y por qué es necesario abordarlos de manera integral.
El problema va más allá del sistema político
Si bien es cierto que el Congreso y los partidos políticos son símbolos evidentes de la crisis institucional, no podemos perder de vista que el problema es mucho más profundo. En el Ejecutivo y en la administración pública también enfrentamos dificultades, como la falta de confianza ciudadana en los presidentes y la alta rotación de cargos directivos. Además, la baja calidad regulatoria y los problemas en la judicatura también contribuyen a la crisis.
La importancia de una reforma integral
Si bien es urgente y prioritario abordar los problemas del sistema político, no podemos considerar que una reforma en este ámbito será la solución definitiva. Es necesario aprovechar esta oportunidad para también revisar y mejorar otros aspectos clave de nuestra institucionalidad pública, como el empleo público, la calidad regulatoria, la gobernanza judicial y el activismo judicial.
Una institucionalidad fuerte para enfrentar los desafíos actuales
En un contexto en el que la democracia se ve amenazada por el populismo y la anti-política, es fundamental fortalecer nuestra institucionalidad en todas sus áreas. Solo así podremos enfrentar los desafíos actuales y entregar los resultados que nuestra sociedad necesita.
Conclusión
Si bien la reforma al sistema político es necesaria, no podemos considerarla como la única solución a la crisis institucional que enfrentamos. Es importante abordar de manera integral los problemas que afectan a nuestra institucionalidad pública en su conjunto. Solo así podremos fortalecer nuestra democracia y enfrentar los desafíos que se presentan en la actualidad.