¡Descubre cuándo recibirás tu devolución de impuestos en la Operación Renta 2024!
Una nueva Operación Renta comienza en pocos días en nuestro país y te contamos todo lo que debes saber al respecto. El 1 de abril comienza el periodo para efectuar la Operación Renta 2024, proceso en que trabajadores y contribuyentes, ya sean personas naturales o jurídicas, deben declarar sus ingresos obtenidos durante 2023. El trámite se debe efectuar de manera online o presencial en el Servicio de Impuestos Internos (SII) en las fechas establecidas, y posteriormente, el contribuyente deberá pagar impuestos o recibirá una devolución de estos, según su situación.
¿Cuáles son las fechas de pago de la devolución de impuestos?
Las personas a las que les corresponda devolución de impuestos, recibirán el pago según el día en que realizaron la declaración de renta. El primer pago de devoluciones de impuestos se efectuará el 26 de abril y estará dirigido a quienes hayan declarado su renta entre el 1 y 8 de abril y además escogieran recibir el dinero vía depósito. Las otras fechas de pago de la devolución de impuestos son:
- Si declaras renta entre el 9 al 19 de abril: Recibes el depósito el 14 de mayo.
- Si declaras renta entre el 20 y 26 de abril: Recibes el depósito el 20 de mayo.
- Si declaras renta entre el 27 de abril y 10 de mayo: Recibes el depósito el 28 de mayo.
Por el contrario, las personas que al momento de efectuar su declaración opten por el recibir el dinero mediante cheque, obtendrán el dinero de su devolución el día 30 de mayo.
¿Quiénes deben declarar renta?
Este 2024 deben declarar renta las personas que:
- Tuvieron un ingreso anual superior a los $10.402.992, salvo que este corresponda a sueldos de un solo empleador.
- Quienes tuvieron más de un empleador o pagador.
- Personas que trabajaron a honorarios y quieren optar a la cobertura parcial para sus cotizaciones previsionales.
- Quienes solicitaron el Préstamo Solidario en 2020 y/o 2021, ya que en esta Operación Renta se calcula y paga cuota(s) correspondiente(s) (30% del monto solicitado, respectivamente). En caso de haber prepagado estos préstamos, debes declarar renta si tuviste retenciones adicionales en tu sueldo o boleta de honorarios, para solicitar la devolución de excedentes.
Adicionalmente, a contar del 1 de abril, pueden declarar renta, pese a no estar obligados, quienes quieran acceder a algún beneficio o crédito tributario, por ejemplo, la Rebaja de Intereses por Dividendos Hipotecarios y/o el Crédito por Gastos en Educación. Desde el SII destacan que en el caso de las empresas, todas tienen la obligación de presentar su declaración de Renta. Estas fechas y obligaciones son fundamentales para que los contribuyentes cumplan con sus responsabilidades tributarias y reciban las devoluciones correspondientes de manera oportuna.
La Operación Renta: Un proceso clave en la economía nacional
La Operación Renta representa un hito crucial en la economía nacional, donde los contribuyentes cumplen con su deber tributario al declarar sus ingresos del año anterior. Este proceso, que inicia el 1 de abril, no solo implica un ejercicio de transparencia fiscal, sino que también es un mecanismo que promueve la equidad y el desarrollo social al asegurar que todos contribuyan según sus capacidades. Con fechas precisas de declaración y devolución de impuestos, el Servicio de Impuestos Internos (SII) coordina este operativo que abarca tanto a personas naturales como jurídicas. La devolución de impuestos, esperada por muchos, alivia la carga financiera de aquellos que cumplen con sus responsabilidades tributarias.
La inclusión de nuevos criterios y beneficios en la declaración, como el Préstamo Solidario y los créditos tributarios, amplía el alcance de esta operación, permitiendo que más personas accedan a los recursos que necesitan para enfrentar diversas situaciones económicas. La Operación Renta no solo es un proceso administrativo, sino un pilar fundamental en la recaudación fiscal del país y en la redistribución de recursos para el bienestar colectivo. Su correcto desarrollo asegura la solidez financiera del Estado y fortalece la confianza de los ciudadanos en el sistema tributario.