El calor y el sudor aumentan el riesgo de infecciones por hongos en verano
El verano es una época de altas temperaturas, sudor y humedad, lo cual favorece el desarrollo de hongos y, por ende, las infecciones fúngicas. ¿Sabes cómo disminuir el riesgo de contraer este tipo de afecciones? En este artículo te daremos algunos consejos para protegerte del calor y disfrutar de la temporada sin preocupaciones.
Las infecciones fúngicas más comunes en verano
Antes de entrar en detalles sobre cómo prevenir las infecciones por hongos, es importante conocer cuáles son las más comunes durante esta temporada. Según expertos de la Clínica Las Condes y la Clínica Universidad de Navarra, las infecciones fúngicas más frecuentes en verano son:
- Pitiriasis versicolor: afecta la piel del tronco posterior o anterior, causando pequeñas manchas decoloradas.
- Micosis de pliegues corporales: afecta las zonas con pliegues cutáneos, como las axilas, ingle y pliegue mamario, causando lesiones con descamación y picor.
- Tiña pedis o pie de atleta: es una infección común en personas con sudor excesivo en los pies, causando descamación, picor y erupciones entre los dedos.
Consejos para prevenir las infecciones por hongos
Para disminuir el riesgo de infección por hongos en verano, es importante seguir algunas medidas preventivas. Estas incluyen:
- Mantener las zonas propensas a infecciones aireadas, secas y libres de sudor: después de bañarte en piscinas o playas, asegúrate de secar bien las áreas como los pliegues cutáneos.
- Lavar y secar correctamente después del baño: especialmente en los pliegues cutáneos, es fundamental lavar y secar adecuadamente para evitar la proliferación de hongos.
- Usar calzado abierto: en verano, opta por zapatos abiertos que permitan una mejor ventilación de los pies. Si es posible, evita el uso de calcetines.
- Evitar la humedad prolongada: la humedad favorece el crecimiento de hongos, por lo que es importante evitar el uso de ropa ajustada o telas que favorezcan la sudoración. Además, es recomendable cambiar la ropa sudada de forma temprana y mantener la piel seca, especialmente en los pies y pliegues corporales.
Consulta a un dermatólogo ante cualquier cambio cutáneo
Si notas cambios cutáneos considerables o presentas síntomas similares a los descritos anteriormente, es fundamental consultar a un dermatólogo. El tratamiento dependerá del área corporal afectada, el tipo de hongo y la gravedad de la infección. Además, las condiciones de salud del paciente pueden influir en el tipo de terapia requerida.
Recuerda que prevenir las infecciones por hongos en verano es fundamental para disfrutar de la temporada sin preocupaciones. Sigue estos consejos y mantén tu piel sana y protegida durante todo el verano.
