La transformación digital del Estado y la permisología
La obtención de permisos estatales para llevar a cabo proyectos de inversión ha sido un proceso lento y burocrático en muchos países. En este sentido, la expresión ‘permisología’ ha surgido para denunciar los retrasos generalizados en la obtención de las autorizaciones necesarias. Un informe reciente de la Comisión Nacional de Productividad reveló que la construcción de una planta desaladora puede llevar más de once años en promedio, mientras que un proyecto minero puede tardar casi nueve años en obtener los permisos necesarios.
Este problema se debe a diversas razones, pero además de las iniciativas legislativas para reducir los plazos de obtención de permisos, también es necesario abordar los factores prácticos y de gestión que agravan la situación. Uno de ellos es el incumplimiento generalizado de la obligación legal de conformar expedientes de las autorizaciones que se tramitan ante los organismos sectoriales correspondientes.
La falta de transparencia en este proceso es evidente. A pesar de que la Ley de Procedimiento Administrativo garantiza a los particulares el derecho a conocer su propio expediente, los servicios públicos han interpretado que solo se puede acceder a la información a través de la Ley de Transparencia. Esto dificulta aún más la obtención de información completa sobre los expedientes y genera retrasos adicionales.
La importancia de la transformación digital en la permisología
La falta de un expediente electrónico para hacer un seguimiento de los procesos de autorización no solo dificulta la actividad empresarial, sino que también crea requisitos disímiles para proyectos similares en diferentes regiones, lo que aumenta la incertidumbre y desincentiva la inversión y la creación de empleo.
Además, la falta de una plataforma informática uniforme y de uso generalizado impide a las autoridades tener información valiosa sobre los cuellos de botella y las áreas que requieren mejoras. Esto lleva a que se impongan requerimientos excesivos, repetidos o incluso contradictorios, lo que aumenta la complejidad y los costos del proceso.
La solución está al alcance de la mano
Afortunadamente, la solución a este problema no requiere de una nueva ley. Tanto el Servicio de Evaluación Ambiental como la Superintendencia del Medio Ambiente ya cuentan con sistemas informáticos transparentes y modernos que se utilizan para conformar y tramitar los expedientes de evaluaciones de impacto o supervisar el cumplimiento de la normativa.
Proponemos que todos los organismos encargados de otorgar permisos utilicen la plataforma informática existente en el sistema de evaluación de impacto ambiental. Esto agilizará los procesos, garantizará la transparencia y proporcionará acceso inmediato a la información, cumpliendo así con las exigencias legales y mejorando la eficiencia de la administración pública.
Beneficios de la transformación digital en la permisología
La implementación de plataformas informáticas en el proceso de permisología facilitará la obtención de permisos, mejorará la calidad de gestión y creará un entorno más propicio para la inversión y el desarrollo económico del país. Esto se traducirá en mejoras concretas para el común de los ciudadanos, como la generación de empleo y el impulso de la economía.
Conclusión
La transformación digital del Estado es fundamental para agilizar la permisología y fomentar la inversión en el país. La implementación de plataformas informáticas en el proceso de obtención de permisos permitirá reducir los retrasos, mejorar la transparencia y generar un entorno propicio para el desarrollo económico. Es hora de aprovechar las herramientas tecnológicas disponibles y mejorar la gestión pública en beneficio de todos los ciudadanos.
