El futuro incierto de la hospitalización domiciliaria
La Corte Suprema ha tomado una decisión que ha generado preocupación en el sector de la hospitalización domiciliaria. La solicitud de la Superintendencia de Salud para aplazar en seis meses la aplicación de las rebajas del valor por las Garantías Explícitas en Salud (GES) ha sido rechazada, lo que ha dejado en incertidumbre la viabilidad de las isapres y el futuro de los cerca de 40 mil pacientes que reciben estas prestaciones en el sistema de salud privado.
Diego Hurtado, presidente de la Asociación Chilena de Instituciones de Salud Domiciliaria (Achisad), explica que este fallo ha llevado el escenario a una situación cada vez más crítica. La resolución parece estar orientada a perjudicar a las isapres en lugar de intentar resolver la severa crisis en la que se encuentra el sistema de salud. Los más perjudicados serían los más de 40.000 pacientes al año que necesitan y dependen de este tipo de atenciones, y que quedarían literalmente desprotegidos.
El riesgo para los pacientes y el sistema de salud
La preocupación es profunda por aquellos que reciben y dependen de la hospitalización domiciliaria para tener una mejor calidad de vida. Estos pacientes son financiados en su mayoría por las aseguradoras de salud, y si estas enfrentan problemas o llegan a desaparecer, al menos 900 pacientes crónicos de alta complejidad y larga estadía tendrían que volver a una clínica u hospital.
El sistema de salud no está preparado para recibir ese número de pacientes que requieren camas críticas o intermedias. Esto representaría un aumento del 30% en la demanda de atención, tanto en el sistema público como en el privado. La situación es aún más preocupante en los casos pediátricos, ya que en todo el país solo hay 738 camas críticas de dotación basal en el sistema público-privado. Si consideramos que la mitad de los 900 pacientes de alta complejidad y larga estadía son niños, estas atenciones representarían el 60% del total de camas críticas pediátricas del país, lo que empeoraría el escenario en el futuro.
La crisis en el sistema de salud
El presidente de Achisad advierte que si se corta el financiamiento de los prestadores, se generará una crisis irreparable en el sistema de salud. Muchos de los pacientes financiados por las isapres necesitan dispositivos médicos y ventiladores mecánicos para poder vivir. Es irrisorio que estos servicios queden al margen de la discusión, especialmente cuando liberan camas críticas en el sistema público y privado, y ayudan a descongestionar las listas de espera a nivel nacional.
La importancia de la hospitalización domiciliaria
Según informó Achisad, el 55% de los pacientes que reciben hospitalización domiciliaria en Chile son adultos y el 45% son niños. Los servicios que se les brindan a estos pacientes de alta complejidad y larga estadía representan cerca de 328 mil días cama críticos al año. Lamentablemente, estas camas críticas no están disponibles en el sistema de salud chileno, lo que pone en evidencia la importancia de la hospitalización domiciliaria para garantizar la atención de estos pacientes.
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