La relación entre los alimentos procesados y la depresión
Un reciente estudio reveló que comer alimentos y bebidas procesados podrían estar relacionados con el desarrollo de la depresión. Es decir, aquellos que consumen, por ejemplo, sopas en sobre, salsas, pizzas congeladas, comidas precocinadas y alimentos de placer como completos, vienesas, papas fritas, bebidas, galletas, pasteles, caramelos, donuts, helados, entre otros.
Gunter Kuhnle, catedrático de Ciencias de la Alimentación y Nutrición de la Universidad de Reading, Reino Unido, quien no participó en el estudio, explicó en un comunicado que el análisis realizado sugiere una relación entre el consumo de alimentos ultraprocesados y la depresión, con un riesgo aproximadamente un 50% mayor para quienes consumen nueve raciones (al día) o más (el 20% superior) en comparación con quienes consumen cuatro raciones o menos.
¿Por qué los alimentos procesados y la depresión están relacionados?
Andrew T. Chan, coautor del estudio, indicó que su investigación se centró en la relación entre los alimentos y el riesgo posterior de desarrollar un nuevo episodio de depresión. También mencionó la posibilidad de que los alimentos ultraprocesados puedan empeorar el estado de las personas con depresión crónica.
El catedrático Kuhnle destacó que el hallazgo es interesante, ya que sugiere que la relación entre la ingesta de alimentos ultraprocesados y la depresión se debe a un único factor: los edulcorantes artificiales.
Chan explicó que los alimentos procesados y la depresión están vinculados debido a la inflamación crónica que causan estos productos. Además, existe una relación entre los alimentos ultraprocesados y la alteración del microbioma intestinal, lo cual es un importante mecanismo potencial que relaciona estos alimentos con la depresión.
El estudio y sus limitaciones
El estudio que relaciona los alimentos procesados y la depresión fue publicado en la revista JAMA Network Open y se basó en las dietas de casi 32.000 mujeres de mediana edad que integran el Nurses’ Health Study II. Sin embargo, debido a que no se incluyó a ningún hombre, los resultados no pueden generalizarse. Además, al ser un estudio observacional, solo se puede encontrar una asociación entre la aparición de la depresión y la ingesta de alimentos ultraprocesados.
Aunque se necesitan más investigaciones para comprender completamente la relación entre los alimentos procesados y la depresión, este estudio nos brinda una nueva perspectiva sobre cómo nuestra alimentación puede afectar nuestra salud mental y bienestar. Es importante tener en cuenta que una dieta equilibrada y rica en alimentos naturales puede ser beneficiosa para nuestra salud en general, incluyendo nuestra salud mental.
