Diputada Del Real critica reconocimiento a Garzón y exige explicaciones al ministro

La diputada Del Real cuestiona el reconocimiento a Garzón

La diputada Catalina del Real (RN) ha expresado su descontento con el reconocimiento otorgado al juez español Baltasar Garzón por parte del Presidente Gabriel Boric durante su gira por Europa. Este gesto ha generado diversas reacciones, incluso siendo calificado como ‘bochornoso’ por parte de Chile Vamos.

En relación a esto, la diputada Del Real ha señalado que el Presidente debe comprender que ya no es diputado ni dirigente estudiantil, sino el Presidente de la República. Considera que estos desaciertos son erráticos y difíciles de comprender.

Exigencia de una nota de protesta y citación al ministro

Como integrante de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara, la diputada Del Real ha anunciado que enviará una nota de protesta y solicitará una citación al ministro de Relaciones Exteriores para que brinde explicaciones. Según la diputada, el ministro afirmó no tener conocimiento sobre el reconocimiento a Garzón, lo cual considera contradictorio ya que se trata de una misión diplomática.

La diputada Del Real ha destacado la importancia de mantener una política internacional coherente y continua, que trascienda los cambios de gobierno. Considera que en los últimos dos años, Chile ha experimentado varios desaciertos en términos internacionales, lo cual ha deteriorado la imagen del país.

Desvío de atención y problemas internos

Del Real opina que el Presidente intenta desviar la atención de los problemas internos del país al poner en la mesa el tema de los 50 años. Considera que esta estrategia busca ocultar otros problemas graves que afectan a los chilenos. Además, menciona el caso Convenios, donde el partido del Presidente y varios funcionarios de su gobierno están involucrados en una operación millonaria para defraudar al fisco.

En conclusión, la diputada Del Real critica el reconocimiento a Garzón y exige una explicación al ministro de Relaciones Exteriores. Considera que la política internacional debe ser una política de Estado, con continuidad y coherencia. Además, señala la necesidad de que el Presidente esté presente y gobernando, atendiendo los problemas internos del país.