Lonquimay Bajo Nieve: Más de 1.800 Personas Aisladas y 137 Clientes Sin Luz
Las intensas precipitaciones y nevadas que han azotado la comuna de Lonquimay, en la región de La Araucanía, han dejado un panorama desolador. Un total de 1.885 personas se mantienen aisladas en esta zona cordillerana, una de las más afectadas por el fenómeno climático.
Según el último balance del municipio, solo las rutas principales se encuentran habilitadas, mientras que las secundarias permanecen bloqueadas por la acumulación de nieve. Esto ha provocado que cerca de 137 clientes de la empresa Frontel se mantengan sin energía eléctrica en los sectores de Quinquén y Galletué.
Ante esta situación, desde la Municipalidad de Lonquimay se ha solicitado a Senapred en La Araucanía que se pueda disponer de maquinaria adicional para trabajar en el despeje de las rutas secundarias. Esto con el objetivo de restablecer la conectividad y el suministro eléctrico en la zona.
Cabe destacar que los pasos fronterizos Complejo Pino Hachado y Complejo Icalma también se mantienen cerrados por la acumulación de nieve, lo que complica aún más la situación en la región.
Un Escenario Desafiante para las Autoridades
Las intensas nevazones que han azotado a Lonquimay han puesto a prueba la capacidad de respuesta de las autoridades locales. La prioridad en este momento es restablecer la conectividad y el suministro eléctrico en la mayor brevedad posible, para garantizar la seguridad y el bienestar de los habitantes de la zona.
Además, el cierre de los pasos fronterizos representa un desafío adicional, ya que dificulta la movilidad y el transporte de recursos y ayuda hacia las áreas más afectadas.
Un Llamado a la Solidaridad y la Resiliencia
En momentos como este, la solidaridad y la resiliencia de la comunidad son fundamentales. Las autoridades han hecho un llamado a la población para que mantengan la calma y sigan las indicaciones de los organismos de emergencia.
Asimismo, se espera que la llegada de maquinaria adicional y el esfuerzo conjunto de los equipos de trabajo permitan superar esta situación de manera eficiente y oportuna. La recuperación de la normalidad en Lonquimay es una prioridad para las autoridades y la comunidad en general.
Conclusión
Las intensas nevazones que han azotado a Lonquimay han puesto a prueba la capacidad de respuesta de las autoridades y la resiliencia de la comunidad. La prioridad en este momento es restablecer la conectividad y el suministro eléctrico, para garantizar la seguridad y el bienestar de los habitantes de la zona. Con la ayuda de maquinaria adicional y el esfuerzo conjunto, se espera que la normalidad se restablezca en la mayor brevedad posible.
